Éramos pocos, y llegó la Edge Computing

La edge computing reduce la distancia entre la nube y los dispositivos que capturan o generan datos

Como no teníamos suficiente jerga informática, vino a sumarse una nueva entrada al vasto, normalmente hermético y casi siempre mal comprendido diccionario de los tecnicismos de moda.

Como saben, hay varias clases de computación. En realidad, hay varias clases de todo en estos asuntos. Pero, para no complicarnos antes del primer minuto del primer tiempo, vamos a circunscribirnos a los tipos de computación que existen hoy. Mal o bien, la frase computación en la nube (por cloud computing ) es bien conocida. Significa que ciertas operaciones y funciones no están ejecutándose localmente, en tu notebook o en tu teléfono, sino en una máquina a la que accedemos por Internet . Típicamente, el reconocimiento de imágenes, los correos electrónicos como Gmail o Outlook.com o los servicios de almacenamiento como Dropbox son cloud computing . (OK, sí, no es tan simple como "una máquina", pero estamos tratando de no empantanarnos en los detalles.)

Se usa esta frase tan meteorológica porque en los diagramas solía (en ocasiones, aun suele) representarse a internet con el dibujo de una nube. ¿Por qué? Bueno, porque de la misma forma que las nubes, Internet no tiene límites precisos ni duraderos . Tan pronto tu teléfono se conecta con la Red, pasa a formar parte de Internet y, por lo tanto, los límites de Internet cambian. Y constantemente se suman o se bajan millones de dispositivos. Es un poco más complicado, técnicamente, pero, de la misma forma que las nubes, no hay forma de decir acá empieza Internet y acá termina.

En los diagramas originales se representaba (y sigue siendo así) a Internet como una nube, porque tampoco tiene límites ni precisos ni duraderos

Contrapuesta a la nube está la computación local, es decir, la computación a secas, la que tuvimos en la Argentina hasta que llegaron las conexiones para el resto de nosotros en agosto de 1995 ( en Estados Unidos, en 1989/90 ). En ese paradigma, los procesos y funciones están ejecutándose en tu propio dispositivo y van a estar disponibles incluso cuando no estás conectado a internet . Típicamente, un procesador de textos o un editor de imágenes; salvo que el editor de imágenes o el procesador de textos sean tipo web (como los Docs de Google, digamos), en cuyo caso, de nuevo, es nuboso.

Pues bien, a esto viene a sumarse una nueva familia de tecnologías de las que vas a oír hablar cada vez más y vas a...