Las pepas de membrillo y un sueño que se concretó

En 1994, José Saia producía alimentos de panadería en un horno que tenía en su casa. Julio Tereñes también trabajaba en el rubro alimenticio y hace poco tiempo se había independizado y vendía harina para panaderías. Durante un día de trabajo, Tereñes fue a buscar un nuevo cliente y terminó encontrándose con Saia, que era un viejo compañero de trabajo a quien no veía hace casi una década.Durante su reencuentro, ambos se dieron cuenta de que compartían un mismo sueño: crear una galletita pepa de membrillo de la calidad artesanal de una panadería, pero que se pudiera reproducir de manera industrial. Por eso, en el mismo día de su reencuentro decidieron juntarse y concretar un pequeño emprendimiento. Así fue como crearon Terepín.El nombre surgió de la unión de Tere (por el apellido de Tereñes) y Pin (por el apodo de Saia). El logotipo es un muñeco, que personifica a un panadero que está degustando el membrillo que se usa para hacer las pepas. Con esta imagen quisieron reflejar la característica artesanal del producto, que la empresa tomó como guía desde sus comienzos.Las coincidencias continuaron, ya que el lugar que consiguieron...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR