El Patrimonio Intangible en la comunidad Campechuelense.

AutorEnrique Rosabal Lago
CargoProfesor Auxiliar. Licenciado en educación. Investigador
Introducción

El estudio del patrimonio cultural engloba aristas en las que se ubican de manera teórica y expositiva los fondos principales a los que se les dedica especial interés para su preservación para las futuras generaciones. El Patrimonio en los contextos locales cubanos es un elemento dentro de las Ciencias Sociales que necesita ser trabajado para buscar un mejor entendimiento y un mayor acercamiento a lo que realmente identifica cada localidad, adecuando los conceptos generales sobre la temática a cada contexto.

El estudio menos perceptible y que pareciera hasta años atrás, fuera del contexto patrimonial, es el que se reconoce hoy como Patrimonio Inmaterial. Dicha concepción está aún en debate entorno a la definición que se ha dado sobre si es Patrimonio Inmaterial o Intangible, y que en los últimos tiempos se ha incluido como cultura popular tradicional, a fin de aglutinar más elementos y obviar la dicotomía entre lo intangible y lo inmaterial.

Un comentario del estudioso del tema Jesús Guanche. En relación con esta contrariedad de conceptos plantea que “...son conceptos concomitantes; no se oponen, sino que son alternativas conceptuales... por un supuesto concepto de cultura inmaterial, término bastante infeliz y maniqueo, que parte de la oposición a la denominada cultura material, como si la música, la danza, el pensamiento mismo, la oralidad y otras manifestaciones no siempre tangibles del quehacer humano, fueran inmateriales y no formas muy complejas de la materia...” (1)

La discusión entre lo inmaterial e intangible se ha inclinado a favor de cultura inmaterial, como sino existieran elementos concluyentes entre ellos. Coincidimos con el análisis factual que Guanche realiza desde posiciones realistas que contribuyen al mejor entendimiento del patrimonio en tanto continúan discrepancias que no abordaremos entre aspectos que tributan a este tipo de patrimonio como folklor y cultura popular tradicional.

De manera que una cosa si queda claro, “se entiende por Patrimonio Cultural Inmaterial los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que le son inherentes, como parte de su Patrimonio Cultural”. (2)

Esta cultura inmaterial tiene sus máximos exponentes también en las comunidades y contextos locales pequeños, donde se recrean y transmiten de generación en generación constantemente en interacción en muchos casos con la naturaleza; no obstante que la comunidad a pesar de expresarlo cotidianamente, no identifica sus costumbres y tradiciones, resultando las relacionadas con las liturgias y otras creencias, necesitando de especialistas o entendidos en el tema que contribuyan con su investigación.

Al respecto nos refiere Francesc Hernández Cardona que este “Se nos presenta como una parte del pasado que forma parte de nuestro presente. Nuestra cotidianeidad está construida sobre millones de hechos y decisiones que ocurrieron en el pasado. Toda nuestra realidad (conocimientos, creencias, tradiciones, organizaciones, costumbres alimentarias, (...) etcétera), se ha configurado hace decenas, centenas o miles de años, y prácticamente nadie lo tiene en cuenta.”(3)

Campechuela, por ejemplo no cuenta hoy con un estudio o registro que aborde de manera científica la tradición cultural, y no nos referimos a los “Paseos del Malecón”, a la “Retreta”, la “Diana Mambisa”, o la procesión de Santo Tomás de Aquino, sino a un estudio causal, factual, instructivo y de análisis conceptual de cada fenómeno en lo que se pueda discernir de entre tradiciones culturales, folklor ( muchas veces confundido con el arte africano, lo que es un error), personalidades, usos, representaciones en fin, en tal sentido abordaremos los aspectos más significativos de esta parte del Patrimonio.

Teniendo en cuenta las particularidades del territorio, los especialistas de las diversas instituciones culturales han desarrollado un trabajo de búsqueda en el sentido más amplio de los elementos que conforman su patrimonio local, así como el rescate, la difusión, y la promoción del patrimonio cultural y natural, en tal sentido pretendemos abordar los aspectos más significativos del tema planteado en principio.

Desarrollo
Campechuela Génesis de un nombre

Teniendo en cuenta que el entorno natural que circunvala a lo que constituye el actual municipio de Campechuela, a pesar de tener un alto grado de antropización está constituido por aspectos que forman parte intrínseca de nuestros paisajes culturales, con un fuerte contenido de elementos inmateriales asociados a los mismos, téngase en cuenta que el origen del nombre de este territorio está estrechamente relacionado con un elemento paisajístico característico de nuestra zona que es el Campeche (Haematoxylom Campechianum), este arbusto que le da nombre a la cabecera municipal y al municipio, y que en la antigüedad era muy abundante en la zona, hoy está en proceso de extinción por la tala indiscriminada de que fue objeto por parte de los comerciantes de madera en un primer momento y luego por las compañías azucareras que se asentaron en esta llanura para dedicarse al cultivo de la caña de azúcar para la fabricación de este importante producto alimentario que durante siglos ha formado parte de la identidad del cubano y que al decir del polígrafo Don Fernando Ortiz, ”junto al tabaco ha constituido la columna central de la economía cubana”(4)

El Campeche Sus valores intangibles

Partiendo que son contentivos del patrimonio intangible “los conocimientos y usos relacionados con la naturaleza de la cual se derivan concepciones relativas al Medio Ambiente Natural tales como marcos temporales y espaciales, actividades y conocimientos agrícolas; conocimientos y usos ecológicos, farmacopea médica y prácticas terapéuticas; cosmologías, ...”(5)

Vale destacar que este arbusto conocido también como Palo Campeche, ha tenido en la zona un consistente uso devenido intangible para los habitantes de la zona rural del territorio, ya que ha servido para las construcciones de las viviendas de los campesinos de la zona, en este caso como horcones labrados, teniendo gran durabilidad y resistencia al deterioro bajo tierra.

Es también importante dentro de la farmacopea médica ya que, el leño además, se puede aplicar teniendo en cuenta que “posee propiedades corroborantes*, astringentes** y desinfectantes contra las diarreas crónicas, etc.” (6)

En varias fuentes se refiere a que el Campeche es efectivo en forma de cocimiento o en extracto contra las diarreas crónicas, de acuerdo con los criterios del científico Slandley, P.C, “el leño es oficinal en la Farmacología de Estados Unidos, se usa en medicina como astringente suave, especialmente en la diarrea y la disentería. Su madera contiene alrededor de un 10 % de Tanino. Las semillas se emplean a veces para sazonar los alimentos,” (7)

Acerca de la preparación del cocimiento del Campeche podemos decir que según el científico Grosourdy, R.,”se prepara con medio manojo hasta uno de raspadura de aserrín de Campeche y media botella de agua, en cocimiento que se administra por tragos como bebida diaria, después de endulzada convenientemente, siente muy buen efecto contra las diarreas crónicas...” (8)

La terminología empleada por los científicos que en cada momento han sido citados, necesita evidentemente de especialistas que puedan ofrecer una información más esclarecedora sobre las propiedades químicas que posee la especie y aunque no es el objetivo principal de este trabajo, sí se pueden emplear en las acciones de Educación Ambiental que se proyectan como parte importante de esta investigación.

El desconocimiento de los valores naturales y de las propiedades farmacéuticas del Campeche fue quizás el elemento esencial que contribuyó a que sólo se empleara como material combustible. Empero es significativo, cómo dentro de sus características aparece la distinción de que desde la óptica estética se puede emplear, por los colores que recrea, desde el rojo hasta el negro en la fabricación de muebles, sin que se conozca en el territorio pieza alguna elaborada por esta madera.

La corteza de la planta es favorable para la fabricación de barnices y tintes, por la concentración de Tanino que posee; es muy empleado, por ejemplo el Mangle Rojo en la obtención final de esos productos en la zona, relegando al olvido el árbol que nos posibilita también ese resultado y que además nos proveyó de un nombre.

¿Qué ha hecho el Museo en tal sentido?

En el interés de esclarecer la importancia y el objetivo esencial del trabajo y proyecto, tiene especial valor actualizado en el proyecto de formación de una Cultura General Integral en que ese encuentra enfrascado el Estado cubano; pero sobre todo, está encaminado como nuestro objetivo esencial a la adquisición de conocimientos, en el caso que nos ocupa, sobre los valores del Campeche y la formación de valores en torno suyo, de la historia y del amor a la naturaleza. De manera que tiene como elemento esencial el trabajo con la sociedad; pero también con los elementos culturales que le preceden, desde el surgimiento del territorio y el nombre, hasta el fomento de una iniciativa para su preservación y el incremento de la especie; pero principalmente en la orientación de los procesos económicos del territorio y los que indudablemente contribuyeron a la depredación de la especie en la...

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