Oportuna auditoría de las causas de corrupción

Los escandalosos casos de corrupción del kirchnerismo, ventilados en las últimas semanas en todos los medios de difusión debido a las novedades que se han producido, provocaron una lógica conmoción en la sociedad y una paralela inquietud acerca del papel que jugó la Justicia en esas causas, porque ninguna de ellas es nueva y algunas datan de hace varios años, lapso en el que esos sumarios verificaron muy escasos avances hasta que el kirchnerismo abandonó el poder. Tampoco dejó de sorprender que algunos jueces y fiscales que mantenían aletargados los sumarios que más comprometían al poder recuperaran la voluntad y la agilidad tras el cambio de gobierno.

Ante este preocupante panorama de una Justicia que, en algunos casos, no parece moverse en función de la búsqueda de la verdad, sino de la conveniencia política, no cabe más que elogiar la valiosa iniciativa formulada por el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires a mediados del mes pasado para que el Consejo de la Magistratura realice una auditoría sobre los 12 juzgados federales de la Capital con el fin de verificar el estado y los avances en las causas de corrupción.

Tan destacable como esa iniciativa del Colegio de Abogados, que recibió adhesiones de otras entidades, es el hecho de que en menos de un mes el Consejo de la Magistratura hizo lugar al pedido y accedió a efectuar la auditoría solicitada sin que los representantes del kirchnerista Frente para la Victoria se opusieran. Prefirieron, en cambio, optar por la abstención.

Tal vez en la velocidad con que los consejeros decidieron aceptar la muy útil propuesta de los abogados incidió decisivamente la muy escasa consideración que la sociedad tiene de la labor judicial en los casos de corrupción, que tan escasas sanciones suelen recibir. Para ilustrar esta situación, el texto del Colegio de Abogados, firmado por su presidente, Guillermo Lipera, y por todos los miembros del directorio, citó estudios que indican que desde la comisión de un hecho hasta su judicialización suelen transcurrir alrededor de cuarenta meses. A su vez, el tiempo promedio entre la denuncia de un hecho y el inicio de la etapa de juicio es de más de 86 meses; esto es, más de siete años. En definitiva, desde la comisión del hecho hasta el inicio del juicio transcurren, en promedio, poco más de diez años.

Pero además, son muchas las causas que, una vez que el periodismo deja de ocuparse de ellas, entran en un cono de sombras caracterizado por el letargo, que...