El nuevo Merval, todo un duro de voltear

La plaza accionaria porteña se reveló esta semana como un mercado vigoroso con capacidad para capear las preocupaciones que ganaron al resto de los mercados mundiales.

Esa condición volvió a quedar a la vista ayer cuando el remozado y ampliado índice Merval absorbió de nuevo una toma de ganancias para cerrar neutro tras una rueda de marcada volatilidad a pesar de la tendencia bajista que fue común denominador en la mayoría del resto de los mercados.

La ola de cautela que se expandió sobre el resto de las plazas tiene que ver con el frente de elevada volatilidad monetaria que se abrió, al confirmar el yuan su ingreso en las grandes ligas (ya es parte de los Derechos Especiales de Giro del FMI). También al tender a derrumbarse la libra esterlina y a amagar a fortalecerse el dólar. Pero aún ayer, cuando el dólar volvió a entrar en "pausa" (al conocerse que la economía de EE.UU. había creado menos empleos que los esperados y -por lo mismo- volverse a especular que la Fed dejará para diciembre la suba de tasas-) Wall Street...