La muerte de Sanabria le abrió paso la polémica

Mientras continúa la consternación por la muerte de Héctor Arnaldo Sanabria, el jugador de Deportivo Laferrére fallecido anteanoche por un síncope durante el partido con General Lamadrid, por la 4a fecha del torneo de primera C, los comentarios que mezclan acusaciones cruzadas y opiniones opuestas recrudecieron en las últimas horas.Seguramente, las palabras que más impactaron fueron las del defensor Pablo Nievas, compañero de Sanabria y capitán de Laferrére, quien se mostró molesto por la falta de controles médicos en las categorías más chicas del fútbol argentino. "A pesar de que hacés el mismo esfuerzo que un jugador de la A, no tenés cobertura médica ni un chequeo antes de la pretemporada. No te hacen ni un electro. Llegás a un club amateur de la C o de la D, te contratan, arreglás la plata, le das la mano al dirigente y a la cancha", sostuvo el jugador en diálogo con TyC Sports, antes de dirigirse al velatorio de Sanabria, que se realizó ayer, en una sala ubicada en la ruta 23, en el modesto barrio La Perlita, de la localidad de Moreno.De acuerdo con la agencia DyN, las afirmaciones de Nievas (que hizo extensivo su reclamo a "cualquier club de la C que elijas"), se contradicen en parte con los dichos de Eduardo Cáceres, DT de Laferrére, quien aseguró que en la entidad del Oeste "se hacen todos los estudios y todos los controles médicos" a sus jugadores, al tiempo que, de todos modos, remarcó que "desde la B para abajo hay que exigirles controles semestrales más exhaustivos a todos los clubes".Las frases que pretenden indicar la veracidad de una u otra postura tuvieron en Alejandro, hermano del fallecido, una versión similar a la de Nievas, ya que jamás se enteró de que a Héctor le hayan realizado algún control. "Yo por lo que hablé con él, nada, nada... sabés como son los clubes del ascenso. Les pido a todos que cuiden a los chicos. Mi hermano era un tanque. Nunca tuvo un episodio parecido y mirá que jugó en Guatemala, donde hace un calor infernal... y en Costa Rica", sostuvo. En el velatorio también se supo que en la cancha, al momento de la tragedia, estaban los padres del futbolista, quien hoy hubiera cumplido 28 años. Alejandro, ante la requisitoria de muchos que buscaban echar luz sobre el momento fatídico, explicó: "Lo último que dijo fue a un rival: «Me duele el pecho, tirala afuera» después, los médicos no supieron explicarnos bien cómo había muerto, solamente que llegó sin vida, que se había muerto en la ambulancia", en relación al trayecto...