Molesto por filtraciones, Berni relevó a un jefe

El hecho que detonó el cambio en la estratégica Superintendencia de Seguridad Metropolitana de la Policía Federal fue el robo de la camioneta 4x4 del abogado Fernando Burlando, en Palermo. Después de enterarse del hecho delictivo por los medios de comunicación, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, decidió desplazar al comisario general Héctor De Vargas.El cambio, en una aérea clave, se dio además porque De Vargas no pudo cumplir con los objetivos trazados por Berni, a cargo del manejo de las fuerzas federales de seguridad."El fin de semana pasado, además del hecho que sufrió Burlando, hubo una serie de robos de autos de alta gama que terminaron de definir la situación", afirmó a LA NACION una fuente oficial.A su vez, otra fuente oficial dijo que Berni ya pensaba en hacer cambios la semana pasada, después de que fracasaran dos allanamientos en financieras que le prestaban dinero a personas de bajos recursos."Desde algún sector hubo filtraciones. Eran dos allanamientos simultáneos en la avenida Corrientes. Estábamos convencidos de que los procedimientos iban a resultar positivos para la investigación, pero no se pudo secuestrar documentación importante. No sospechamos de De Vargas, pero Berni consideró que el área necesitaba un cambio de mando", agregó la fuente consultada.Antes de estar al frente de la estratégica Superintendencia de Seguridad Metropolitana, dependencia que tiene a su cargo las 53 comisarías porteñas, Operaciones, el 911 y Orden Urbano con los cuerpos de Infantería y Montada, los grupos de operaciones especiales federales (GEOF), la Policía Comunitaria y la seguridad en espectáculos deportivos. De Vargas tuvo un paso exitoso por la Policía Científica."De Vargas hizo un excelente trabajo cuando estuvo al frente del proyecto Sistema Federal de Identificación Biométrica para la Seguridad (Sibios). Su paso por la...