Messi derriba marcas y hace del fútbol un ballet

SEVILLA.- Andrés Iniesta es un malabarista. Mira para allá y lanza el pase acá, justo en donde aparece Leo Messi, de izquierda al centro. El crack deja, como una sombra, la media luna. Con el balón dominado, Spahic sale a contenerlo, con una pésima decisión: con las piernas abiertas. Leo hace lo que hacen los grandes, un pase (a sí mismo) entre las piernas de su ingenuo oponente. Del centro hacia la izquierda. Desesperado, Palop, el arquero, sale a su encuentro, para verlo bien de cerca: Messi no lo quiere para nada, ya que con el balón otra vez como extensión de su botín zurdo, envía la pelota por encima del arquero, directo a la red. No se la picó , así como así. Hizo un moño a un gol exquisito, genial, que determinó el 2-0 de Barcelona contra Sevilla (el primer tanto, un tiro libre de Xavi), que mantiene al equipo catalán con cierta esperanza de alcanzar a Real Madrid en la Liga de España. Tiene 63 puntos, siete menos que el líder, que hoy chocará contra Málaga, del gran Manuel Pellegrini. Todo, dentro del marco de la 28» jornada.Messi logra lo que consiguen los grandes: que la Liga, que Barcelona, que Real Madrid, que todo el mundo se encuentre detrás...