Contra los medios, una ofensiva sistemática imitada en la región

Hugo Chávez no sólo exportó petróleo en sus 14 años de gobierno. Impuso y exportó, además, una fórmula de mando que consistió en avanzar sobre los contrapesos al Poder Ejecutivo y en someter a los medios que pusieran en duda su visión de la realidad, la limpieza de sus métodos y la eficacia de sus resultados.Como parte de su transformación de la democracia representativa en un gobierno plebiscitario, sin mediaciones entre el líder y el pueblo, es decir, entre su palabra y quienes debían escucharlo, era esencial que controlara el flujo de información. Y, en buena medida, lo consiguió.Tras un inicio de mandato en el que fue apoyado por parte de la prensa privada, Chávez se lanzó a construir un aparato de medios con radios, canales de televisión y medios gráficos, que bajo diversas etiquetas respondieran al gobierno.La idea era derrotar a los "medios hegemónicos" o los "monopolios", una causa imitada más tarde en la Argentina. Así terminó constituyendo un virtual "monopolio" estatal, un aparato de medios oficialista cuyos contenidos respondían al chavismo sin el menor desvío de la línea de gobierno, cualquiera que fuera."Una cosa es la crítica, y otra, la conspiración", dijo Chávez en una emisión de su famoso Aló presidente . Allí advirtió que los medios "se pueden llevar una sorpresita en cualquier momento". ¿Quién trazaba la línea entre crítica y conspiración? Sólo su buen saber y entender.Dos años antes había sacado del aire al canal RCTV, el ataque más fuerte de sus años de gobierno a los...