De los lectores: cartas & mails

DietasEl lector Maurette, en su carta del 10 de abril, cita a la diputada Camaño, que dijo en el Congreso: "No podemos seguir cobrando lo que cobramos, mientras no hacemos un carajo, porque el pueblo está con problemas, por si no se dieron cuenta...". Maurette señala que la legisladora tal vez haya querido decir: "No podemos seguir cobrando lo que cobramos, mientras los maestros, policías y médicos cobran lo que cobran, porque el pueblo está con problemas, por si no se dieron cuenta...". Por mi parte coincido, pero Camaño debió agregar: "Es por ello que debemos renunciar a nuestras dietas y trabajar ad honorem".Roberto A. Meneghinimailto:dr.meneghini@hotmail.comAporte del agroEn respuesta a la carta del señor Fernando Chain quisiera poner en conocimiento del lector, dado su desconocimiento de la problemática rural, que el productor agropecuario no especula con el dólar, invierte para la nueva cosecha y cobra en pesos, nunca en dólares; esa es la manera en que ayudamos al país para alejarnos de Venezuela.Pedro C. MatteucciDNI 5.506.508Consumo de drogasEn la edición del 9 de abril se ha publicado un editorial titulado "Consumo de drogas: cifras que alarman". Mientras la tenencia de drogas para uso personal no esté sancionada -posición que avaló incluso la Corte Suprema- no puede simultáneamente proclamarse que hay motivos de alarma por el incremento del consumo.¿Qué se supuso que iba a ocurrir? ¿Que la legitimación del consumo personal -y la despenalización que persiguen los mismos sectores- iba a hacer decrecer o desaparecer la ingesta de drogas? Es una hipocresía denunciar los peligros de las adicciones mientras social y legalmente se tolera su uso "no problemático" a pesar de los indiscutibles perjuicios que más temprano que tarde causa a la salud. Sería interesante que además de estadísticas que miden el consumo, esos mismos organismos públicos e instituciones informen el coeficiente de resultados que obtienen los interminables tratamientos de rehabilitación que pagamos los contribuyentes con los ingentes recursos que detraen de nuestros impuestos. El problema no es que falta agua, sino que el bote está lleno de agujeros. La mayoría de los países occidentales y los asiáticos de mayor nivel económico prohíben la tenencia y el consumo de drogas. Sin embargo, nuestras políticas públicas ignoran esas legislaciones y adhieren a corrientes liberales y progresistas que -una vez más- han fracasado estrepitosamente.María Isabel Di BiasiDNI...

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