Para Lear, si el conflicto no se arregla la empresa no tiene futuro en el país

Luego del fallo judicial que la semana pasada ordenó la a la planta de Pacheco -hecho que se formalizó ayer-, en la firma estadounidense afirmaron que si el conflicto continúa será difícil convencer a la casa matriz de mantener su presencia en el país.

"Si este conflicto se soluciona, la empresa tiene futuro. Si no, la compañía no tiene futuro. Están en riesgo todos los puestos de trabajo", afirmó el director gerente de Lear, Antonio Marín, en una entrevista con LA NACION, el mismo día en el que fueron reinstalados 16 trabajadores.

El martes pasado, la Sala X de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, a cargo de los jueces Enrique Brandolino, Daniel Stortini y Gregorio Corach -en consonancia con el dictamen del fiscal general Eduardo Álvarez-, ordenó una medida cautelar que retrotrae el conflicto a mayo y exige a la empresa la reincorporación inmediata de 26 trabajadores en conflicto.

Según la empresa, que mostró las actas firmadas por el Ministerio de Trabajo ayer, sólo 16 volvieron a sus puestos de trabajo. Los otros diez ya habían arreglado cobrar su "indemnización más 20 sueldos" para dejar la compañía de común acuerdo.

"El fallo habla de 26 personas y no de 28", aclaró Marín. "Son importantes los números. Dentro de esos 26 están los 14 que no arreglaron, más 10 que cerraron un acuerdo con la compañía. Además, hay otros dos que metieron los delegados de izquierda y que no estaban en el conflicto. Hoy reinstalamos a 16 personas", dijo.

El fallo de la Justicia fue interpretado como una victoria por los partidos de izquierda que motorizaron el conflicto y el gremio de los mecánicos (Smata), y que usaron la situación en Lear como un bandera para denunciar la conflictividad laboral en el sector.

Según Marín, las suspensiones y luego los despidos se debieron principalmente a "medidas disciplinarias", aunque admitió que además fueron impactados por la crisis que golpea a toda la industria automotriz. "Había serios problemas disciplinarios", afirmó el ejecutivo. "La producción bajaba y no éramos confiables para los clientes. No podíamos abastecerlos. Nuestro principal comprador [Ford] decidió importar desde otras Lear del mundo."

Marín afirmó que la planta...