Javier Milei y Victoria Villarruel, ante el riesgo de construir su propia 125
Fecha de publicación | 26 Marzo 2024 |
JAvier Milei y Victoria Villarruel
Del cuadro de Videla que bajó Néstor Kirchner en el Colegio militar en 2004 a la estatua de Kirchner que Victoria Villarruel mudó del Senado en 2024. De la legalización del aborto en 2020 a su condena decidida en este presente. La misma batalla que Javier Milei viene dando hace años en el terreno de las ideas macroeconómicas ahora está dispuesto a librarla en el territorio de dos temas centrales para su identidad política: el aborto y la dictadura. En ese objetivo no está solo: mientras Milei se hace cargo de la primera tarea macroeconómica, para el mercado de las ideas histórico sociales está Villarruel. Así, el libertarianismo instala en el centro del poder una estrategia política de división de tareas que carga de un sentido específico inédito a la dupla presidente y vicepresidenta
Ya no la figura vicepresidencial como complemento anodino o relleno sin demasiado peso propio o electrón libre con autonomía parcial o total, que un día da problemas y/o termina haciendo implosionar presidencias. Ni Scioli ni Julio Cobos. Tampoco Chacho Alvarez o Cristina Kirchner. Contrario a una primera lectura que ve en Villarruel el rostro de otro vicepresidente conflictivo, la titular del Senado parece que está jugando otro juego, siempre en el tablero Milei
El Gobierno investiga las indemnizaciones pagadas por el kirchnerismo a víctimas de la dictadura: una auditoría detectó falta de controles y Justicia apunta a "bandas" falsificadoras
La operación revisionista encarada desde el Poder Ejecutivo, tanto de la lectura canónica en torno a la dictadura como de la legalización del aborto, tuvo una inocultable sistematicidad. Incluyó posteos en X de presidente y vicepresidenta, spots bajando línea o e intervenciones bien directas en la polémica que se abrió en la opinión pública
Se organizó con premeditación y alevosía alrededor de dos efemérides centrales para esos dos debates y sus dos marchas: se inició con la reaparición de Villarruel en una entrevista televisiva el jueves por la noche, cuando faltaban sólo tres días para el 24 de marzo y el regreso del tema golpe, dictadura y terrorismo al centro del debate, y cuatro días para el 25 de marzo, el "Día del Niño por Nacer", que también tuvo su marcha celebratoria el fin de semana, el sábado, en apoyo de las denominadas "dos vidas".
Fueron cuatro días en los que el Gobierno salió con los botines de punta pintado de guerra para la batalla cultural generalizada. Todo, calculado en...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba