En la campaña israelí, muchas opciones, pero poco suspenso

JERUSALÉN.- Calles empapeladas por afiches electorales, chicos que reparten folletos. Radios y canales de TV que no hablan de otra cosa, pero cero suspenso. Si en algo serán recordadas las elecciones legislativas del martes próximo, cuando Israel renovará la Knesset, su Parlamento unicameral de 120 escaños, será por su sabor insípido.Y es comprensible. Según los sondeos, Benjamin Netanyahu -al frente de una alianza entre Likud, de derecha, y el partido nacionalista laico Israel Beiteinu, del ex canciller, Avigdor Lieberman- volverá a ser primer ministro de este país de casi ocho millones de habitantes.La única incógnita es si Netanyahu, de 63 años y cuya formación obtendría entre 32 y 36 bancas (menos que las 42 actuales), se juntará, para formar gobierno con el centro o con la ultraderecha, algo que alejaría aún más cualquier perspectiva de revitalizar el hoy difunto proceso de paz con los palestinos.Brilla el sol, faltan unas horas para que arranque el Sabbat, el día de descanso de los judíos -que representa la parálisis de gran parte de esta ciudad, considerada la capital única e indivisible para los israelíes- y en la calles no se respira ese clima electrizante visto en otros comicios."No hay otra alternativa a Netanyahu, no hay otro líder. Él es el mejor, pero me resulta triste que no haya competición", lamenta Dov, dueño de una tienda de artículos religiosos de la plaza Tiferet del barrio judío de la Ciudad Vieja. "No eran necesarias estas elecciones, el gobierno nunca cayó, no hacían falta", agrega, resignadoNacido en Canadá, pero residente desde hace 28 años en este país, aunque dice que Netanyahu es el único líder, Dov no lo votará el martes próximo. Como muchos otros, optará por Habait Hjehudi (Casa Judía), partido ultranacionalista y religioso encabezado por Naftali Bennett, la gran estrella de estos comicios, que dice que es inviable un Estado palestino y quiere anexar gran parte de Cisjordania (ver aparte).Dror y Nurit, padres de cuatro hijos, oriundos de Ra'anana, al norte de Tel Aviv, están entre ese 20% del electorado aún indeciso, según los sondeos."Es difícil, esta vez hay muchas opciones, muchos partidos pequeños en pugna y, aunque ya sabemos que va a ganar Netanyahu, también sabemos que el día después de las elecciones va a ser muy complejo porque la Knesset va a estar más...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR