Interconexión de redes de telecomunicaciones
| Autor | Roberto Dromi |
| Páginas | 132-187 |
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Desde la aparición de la telefonía hasta mediados de 1980, el mercado de las telecomunicaciones se consideraba un monopolio natural, que exigía una economía de escala para hacer frente a las ingentes inversiones que requería el despliegue de las redes. Por esto llegaba a considerarse antieconómico e inclusive irracional la duplicación de redes o infraestructuras. En consecuencia, la prestación de los servicios de telecomunicaciones se gestionó en la mayoría de los países en régimen de monopolio, otorgados a entidades públicas, con excepción de los Estados Unidos, donde el Estado nunca participó en la gestión de los negocios, encomendando la tarea a empresas privadas, lo que no evitó que el gobierno debiera intervenir para impedir la consolidación de posiciones dominantes1.
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En este contexto, la interconexión, es decir la conexión física y lógica de redes, no planteaba ningún inconvenien-
Esta lógica se ve refutada a mediados de la década de 1980 cuando una serie de circunstancias tecnológicas, políticas y económicas se conjugaron para poner en marcha la liberalización de las telecomunicaciones en las principales naciones del mundo. En dicho proceso, la interconexión e interoperabilidad de las redes pasó a ocupar un rol fundamental al punto de considerarse como "presupuesto material de la liberalización"2.
Tecnológicamente, en Estados Unidos, desde el descubrimiento del transistor en 1947 y los avances en la tecnología electrónica y de radiocomunicaciones surgieron empresas con interés en participar en los negocios del sector, Page 136que requerían de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) la tutela de sus intereses, garantizando la competencia frente a las empresas dominantes3.
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En la década de 1970, surgen las primeras preocupaciones en la incipiente Comunidad Económica Europea en materia de telecomunicaciones. Así, comienza una serie de actuaciones de los órganos comunitarios, una de cuyas primeras preocupaciones era el coste excesivo del paso en las fronteras de las tarifas telefónicas4.
Los inicios de los años 80 en materia de telecomunicaciones vienen signados por dos hechos de especial relevancia para el proceso de liberalización:
_ En 1982 el gobierno estadounidense culmina el proceso iniciado en 1974 contra AT&T. En él se obliga al desmantelamiento de la empresa, que sólo conserva el servicio de larga distancia y la fabricación de terminales. Como contrapartida, el gobierno se habría comprometido a apoyar a la empresa en la conquista de mercados internacionales como compensación. De allí que algunos autores sitúan gran parte del impulso liberalizador que se comienza a materializar por estos Page 138años, en la expansión norteamericana para buscar nuevos mercados5.
_ Por las mismas fechas del otro lado del Atlántico, la administraciónThatcher en Gran Bretaña inicia una serie de reformas. Se privatizaron la empresa British Telecom y la de comunicaciones transnacionales Cable & Wireless y se crea la OFTEL como autoridad regulatoria independiente6. En su programa de 1980 la Comunidad Europea plantea por primera vez la necesidad de ocuparse de las telecomunicaciones en el marco comunitario7.
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En 1986 se dio inicio a la Ronda Uruguay para la renovación del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT), donde comienza a considerarse la posibilidad de establecer un acuerdo de características similares que permitiera regular el comercio internacional de servicios. Dichas negociaciones culminaron en 1994 con la firma en Marrakesch del "Acta Final en que se incorporan los resultados de la Ronda Uruguay de negociaciones comerciales multilaterales"8, por el que se creó la Organización Mundial del Comercio (OMC). Dicha acta incluyó en su Anexo I.B el Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (más co-Page 140nocido como GATS), que en su art. XXIX consta de dos anexos sobre telecomunicaciones9.
A su vez, este proceso encontraba respaldo teórico en la economía pues se cuestionaba la idea del monopolio natural en materia de redes y se consideraba que el mercado más eficiente era precisamente aquel en que se abriesen las redes a todos aquellos agentes que quisieran prestar servicios de telecomunicaciones10.
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En síntesis, es en los años 80 dónde la interconexión aparece como gran cuestión de debate en el campo de las telecomunicaciones, como herramienta fundamental para la liberalización del mercado.
Con independencia de su significación legal, la interconexión constituye una técnica que responde a la necesidad de hacer interactuar las distintas infraestructuras (redes) con tecnologías y diseños diferentes, con la finalidad que los usuarios conectados perciban el servicio como si se tratara de una sola red.
La interconexión es, ante todo, un hecho físico, la conexión material de las redes, sobre la que se establece una regulación jurídica específica. De allí que en la legislación argentina, el Reglamento de Interconexión(RNI)11, distinga entre la "interconexión" y el "convenio de interconexión", definiendo la primera como la "conexión física y funcional de las redes de telecomunicaciones utilizadas por el mismo Page 142o diferentes prestadores, de manera que los clientes y/o usuarios puedan comunicarse entre sí o acceder a los servicios de otros prestadores". El "convenio de interconexión" es definido como "el acuerdo jurídico, técnico y económico que celebran dos o más Prestadores, con el objeto de que los clientes y/o usuarios de cada uno de ellos tengan acceso a los servicios y clientes y/o usuarios del otro".
La UIT ha conceptualizado la interconexión como "los arreglos comerciales y técnicos bajo los cuales los proveedores de servicios conectan sus equipos, redes y servicios para permitir a los consumidores acceder a servicios y redes de otros proveedores de servicios"12.
Todas las definiciones presentan un denominador común: el carácter instrumental de la interconexión que tiene como finalidad permitir a los usuarios comunicarse con otros usuarios o acceder a servicios y redes de otros operadores. Precisamente, el fundamento del interés público de la interconexión es su finalidad de servir al público en general pues las telecomunicaciones en algunos casos son consideradas Page 143servicio público13. Es lo que legitima la intervención del regulador a la hora de establecer una serie de condiciones limitativas de lo que se define como un acuerdo entre dos prestadores privados. Lo que nos lleva al rasgo definitorio de la interconexión: su doble naturaleza público/privada. La interconexión se basa en el acuerdo entre dos prestadores que establecen libremente las condiciones en las que realizarán la conexión física y lógica de sus redes, pero que están obligados legalmente a interconectarse a fin de asegurar la prestación de un servicio público.
La interconexión tiene como objeto la conexión física y lógica de las redes, de modo que se garantice su interoperabilidad. La convergencia tecnológica implica precisamente "la capacidad de diferentes plataformas de red de transportar tipos de servicios esencialmente similares"14. Lejos han quedado ya los tiempos en que las cuestiones de interconexión se relacionaban exclusivamente con la posibilidad de vincular redes telefónicas conmutadas para ofrecer servicios vocales. Junto a las redes de telecomunicaciones Page 144pertenecientes a las licenciatarias del servicio telefónico, se despliegan las redes de las empresas de TV por cable y satelital, de las prestadoras de telefonía móvil e Internet. Redes alámbricas e inalámbricas, de estructura vertical jerarquizada y redes horizontales, de conmutación de circuitos y de conmutación de paquetes, de par de cobre, coaxial, HFC15, satelital, de fibra óptica o GSM. De todas ellas es necesario garantizar la interconexión. Es por ello que en la Comunidad Europea se señala que "La convergencia de los sectores de telecomunicaciones, medios de comunicación y tecnologías de la información supone que todos los servicios y las redes de transmisión deben estar sometidos a un único marco regulador"16. Ello incluye, naturalmente, la interconexión.
Las redes se han multiplicado y los servicios, merced a la digitalización, se han homogeneizado, de tal modo que hoy las empresas de telecomunicaciones se encuentran en condiciones de añadir a su oferta de servicios acceso a Internet de banda ancha y radiodifusión y los licenciatarios de TV por cable o satelital pueden añadir a su paquete telefonía o Internet17. El resultado es la concurrencia de agentes hete-Page 145rogéneos que deben competir por un mercado ampliado al que acceden desde situaciones notoriamente desiguales.
Operadores telefónicos (desarrollados a la sombra de los antiguos monopolios, prestadores de servicios públicos, beneficiarios de privilegios fiscales, titulares de redes extensas y poder significativo de mercado), licenciatarios de servicios de TV por cable (poseedores de su propia red, desarrollada en regímenes de libre...
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