La fórmula de Independiente para el éxito: Mancuello + 10

La cabeza de Federico Mancuello debe girar como el tambor de un lavarropas. Al que lo ve, la vista le da vueltas como en los viejos tiempos de los muñequitos con ojos de bolitas. Se volvió un referente de Independiente en la hostil época del ascenso. Durante el receso, ya con Independiente en la "A", conoció al papa Francisco en una audiencia pública. Se vistió de emblema de los tiempos modernos en el regreso a primera, entre ovaciones y goles. Y hasta Gerardo Martino dijo tenerlo en cuenta para el seleccionado argentino. La gente lo espera en la práctica y le deja cualquier souvenir a modo de ofrenda. Una carta, un peluche o un escudo artesanal de los Rojos. Él, el N° 11, agradece en persona o por la vía que vuelve terrenales, para bien o mal, a los que antes parecían inalcanzables: Twitter.Da la impresión de que Independiente no sería hoy Independiente si no tuviera a Mancuello. El mediocampista que juega en todas las posiciones, y que es el goleador de los Rojos, con siete conquistas, tuvo otro partido perfecto, esta vez contra Rosario Central. Abrió el desarrollo con un zapatazo desde fuera del área. Llevó la cinta de capitán por la ausencia de Cristian Tula, lesionado, y a la habitual ovación, la gente le agregó un mensaje directo para el Tata Martino: "Para Mancuello, la selección"."Je… Se nota que los que me pidieron para la selección son los nuestros y me quieren mucho. Me lo tomo con calma. Eso me da más ganas de seguir matándome por la camiseta. Pero el fútbol tiene tanta dinámica que no deja mucho tiempo para pensar. Sólo hay que disfrutar los momentos", dice el héroe de los Rojos.Por si algo le hubiera faltado a Mancuello, asistió a Jesús Méndez en el segundo gol. Eso, sin contar que en tres córners estuvo a punto de hacer un gol olímpico si no hubiera sido por el arquero Mauricio Caranta.Lo único a lo que atinó cuando convirtió fue a agarrarse la cabeza. "El técnico me había retado en el entretiempo porque pisaba mucho el área y no tenía la pelota de frente. En esa jugada me quedó y se dio lo que él me decía. No podía creerlo", explicó Mancuello, de 25 años, nacido en Reconquista, Santa Fe.Al principio, desde el debut en 2008, le costó afirmarse. Como si el viento Sur se hubiera llevado por delante la tormenta, Mancuello revirtió la imagen con la gente, que hace algunos años, en sus comienzos, lo resistió con fiereza. A diferencia de otros chicos talentosos surgidos en el club, él pudo romper los complejos. Se alejó así de casos como los de...

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