El hecho escénico al borde de sí mismo

Los dos espacios están a pocas cuadras. Están separados por un estadio de fútbol. Uno se llama Galería Prisma KH (Wenceslao Villafañe 485). El otro, Fundación Proa (pleno Vuelta de Rocha). En el primero despliega sus formas un ciclo curado por Mariana Obersztern (imposible dejar de ver los viernes, en El Camarín de las Musas, su puesta de Inspiratio). Se llama "Proyecto pruebas". La versión de este año comenzó esta semana (va los viernes, a las 20 y 21). El que esta vez prueba lo suyo es el creador Matías Feldman (imposible dejar de ver los domingos, en El Galpón de Guevara, su puesta de Rapsodia para príncipe de la locura). Feldman, junto a la Compañía Buenos Aires Escénica, ya va por la cuarta página de este laboratorio escénico en estado raro, encendido, inquietante, al borde de sí mismo. En plan de vecindad geográfica como de indagación del hecho escénico, mañana, en Proa, se abre otra etapa de otro laboratorio. Se llama "Direccionario". Se trata del ciclo de conferencias performáticas que va los segundos domingos, a las...