Giselle, el baile de los reclamos y las demandas

El fin del año del Ballet Estable del Teatro Colón no fue como estaba previsto. Lo previsto eran dos funciones de Giselle en la sala con la presencia de la primera bailarina Marianela Nuñez y música interpretada por la orquesta. Por desajustes organizativos internos, lo real son las cinco funciones que están haciendo en el anfiteatro Eva Perón de Parque Centenario sin bailarina invitada ni música en vivo.

El descontento por esta situación lo expresaron los mismos bailarines en el brindis de fin de año. El acto se realizó en el Salón Dorado frente a los directivos de la sala. Una vez leído el comunicado, los bailarines se retiraron del lugar. Anteayer publicaron un texto en Facebook. "Sentimos que nos cierran el telón en nuestra propia casa. Hemos sido informados de un título en el Gran Rex y giras, pero que todavía no han sido confirmados. Al respecto tenemos experiencias de este año con la promesa de reprogramación de El lago de los cisnes, por ejemplo, que nunca sucedió, como así también una gira a Mar del Plata y otra a Corrientes que fueron canceladas días antes de viajar. También, debido a un conflicto en el Teatro Argentino de La Plata, fueron canceladas las funciones de Giselle que la compañía iba a presentar en ese teatro", expresaron en una carta en la que exponen sus diferencias con Maximiliano Guerra, el director del Ballet y coreógrafo de esta versión de Giselle.

Por diferentes motivos, Guerra no salió a explicar lo sucedido. Sí Darío Lopérfido, el director artístico de la...