Gallardo sostiene el ánimo con un mensaje motivador

No resulta fácil evaluar el estado de ánimo con el que vuelve River de tierras mexicanas, pues el partido con Tigres lo llevó por caminos opuestos y desconcertantes. Se sintió afuera cuando perdía 2-0, pero recuperó el ánimo cuando logró el empate en apenas tres minutos sobre el final. Esas dos caras siguen ahí. Del equipo con un juego desintegrado a la recuperación que tuvo que ver más con el temple que con algún mérito futbolístico.

Después de cinco partidos disputados, River todavía no ganó ninguno, pero insólitamente el inestable Grupo 6 todavía le ofrece una oportunidad para acceder a los octavos de final de la Libertadores. Necesita ganarle en la última fecha a San José en el Monumental y esperar que Juan Aurich no triunfe ante Tigres.

Está previsto que el plantel regrese hoy por la mañana a Buenos Aires. Para el partido ante Argentinos, de pasado mañana, el técnico Marcelo Gallardo utilizará mayoría de suplentes. En la intimidad del plantel, el Muñeco aprovechó las horas en México para tener una charla profunda con sus dirigidos. Aprovechando la remontada del final -y más allá de algunas palabras que generaron la autocrítica de los jugadores-, apeló a una exposición emotiva y que tuvo como objetivo impulsar la fe colectiva desde el primer minuto, pensando en el choque decisivo del miércoles que viene ante San José, en el Monumental.

"Tigres no va a ir para atrás para perder. Eso me deja tranquilo. Nosotros somos los primeros comprometidos en tener que ganar. Si se puede, por más de dos goles. Y después será importante lo que ocurra en Perú. Ellos están clasificados y jugarán con la necesidad del equipo peruano. Si bien no es una superficie a la que estén acostumbrados, hará un buen partido. Van a querer seguir sumando para estar en mejor posición en la tabla general. Le tengo fe".

En la intimidad, el plantel recibió el empate como si se hubieran ganado los tres puntos. Los dirigidos por Gallardo, los mismos que...