Un festival de teatro que reúne a directores sub 30

Directores de teatro sub 30 muestran 20 minutos de las obras que están desarrollando. Cada año, durante el mes de agosto ocurre en el Club Cultural Matienzo -ahora ubicado en Villa Crespo-, El Porvenir: un festival que no tiene programadores fijos sino que son los mismos directores que participan los que eligen a los que ocuparán su lugar el año siguiente. Así se forma una red de artistas, una conexión continua entre directores emergentes que, más allá de su posible endogamia, hace del festival un encuentro entre jóvenes con una renovación constante que, a la larga, se vuelve diversa.Paula Baró, creadora de la idea y quien está a cargo de la coordinación general del festival, cuenta que el motivo que lo originó fue conectar y hacer visible a una nobel generación de teatristas. Sobre la forma de curaduría explica que "esta manera lúdica y festiva de elegir artistas propone a los directores- programadores una mirada atenta y profunda sobre el arte escénico contemporáneo, haciendo de esa reflexión la impronta del festival".El espacio es principalmente para directores sub 30, aunque muchos de ellos son a su vez dramaturgos y escriben sus propias obras. "Nuestra misión es brindar un espacio de intercambio para directores que están en etapa de profesionalización. El festival trabaja con fechas de entregas, charlas orientativas, comunicación y reglas de duración y de técnica que fomentan que cada noche logremos hacer las tres obras seguidas."Este año los proyectos están organizados en cuatro programas denominados A,B,C y D, cada uno con funciones los martes, jueves, viernes y domingos de este mes, a las 20.El programa C, cuya última función es la de hoy, a las 20, incluye Garantía, de Juan Isola, que problematiza las relaciones de dependencia; Amarra, de Andrea Marrazzi, que cuenta la historia de una pareja que va a pasar un fin...