Exnovia y amiga: quién es la mujer con la que estuvo a punto de casarse Norberto Oyarbide

Daniela Battelli es locutora de Radio Nacional Folklórica; con el exjuez tenían pensado ser padres por medio de un tratamiento de fertilidad

Ayer murió Norberto Oyarbide. Se lo rememora de distintas maneras y con personas que estuvieron cerca de él.

Se conoce que mantuvo una relación durante ocho años con Carlos Alonso, un exárbitro de básquet y analista de sistemas. Pero su entorno siempre dijo que su gran amor fue la locutora de Radio Nacional Folklórica Daniela Battelli.

Hace unos años, en una entrevista con la revista Caras contó la historia que lo unía con la periodista. "Antes de conocer a Claudio salí con varias chicas e incluso con una de ellas estuve a punto de casarme, en 1984. Esta chica absolutamente bellísima se llama Daniela", reveló. "Aquel casamiento estaba conjugado, con departamento obsequiado por sus padres, fecha de bodas, invitados, salón. Tuvimos una relación bastante extensa, aunque se fue deteriorando y, cuando vi que venía el cierre final de campaña, no tuve los cojones suficientes para llevar adelante semejante responsabilidad", contó sobre ese vínculo.

Y siguió con su relato: "Sabiendo todo lo que iba a causarle, preferí serle sincero y le expliqué con todas las letras por qué motivo no me casaba con ella. Hasta que un día, muchos años después (yo ya era juez y estaba en Comodoro Py), mi secretaria privada, Anita, me dijo: ‘Doctor, hay un llamado registrado en el teléfono de una señora cuya hija sufrió un accidente y está en estado de coma, y a la única persona que nombra es a usted’. Yo me trasladé de inmediato al sanatorio y Dios no sólo salvó a su hija, sino que produjo el milagro de que yo pudiera volver a encontrar la paz no sólo con Daniela sino con su madre y toda su familia".

El exjuez, en esta entrevista, narró: "Entonces, meses después del fallecimiento de mi madre, en octubre de 2007, sentí la necesidad de compartir el almuerzo de Navidad con Daniela y su mamá. Fue muy significativo y marcó mi vida de una manera muy especial, porque en ese momento, Daniela habló como nunca lo había hecho y, aparte de confesarme un afecto indestructible hacia mi persona, me dijo: `Norberto, yo no quiero que mi cuerpo se pudra en la tierra, no me interesa el dinero, no voy a pedir que te cases conmigo, solamente necesito tu semen porque quiero tener un hijo...