Señales que encaminan el regreso de Riquelme

Todos coinciden, en el mundo Boca , que si Juan Román Riquelme así lo quiere, será el primer refuerzo para 2013. El panorama cambió desde el "Bombonerazo", la tarde que los hinchas se mostraron en contra de la continuidad de Julio César Falcioni y pidieron por la contratación de Carlos Bianchi. El Virrey ya regresó, entró en funciones, aunque su primer entrenamiento lo dirigirá el 5 de enero. ¿Qué pasará con el N° 10? Hasta ahora el único que no habló fue el enganche. Los dirigentes le volvieron a abrir las puertas, el flamante entrenador lo calificó como "importante" y no reparó en elogios por todo lo que podría darle al equipo. ¿Y Román? Dio señales en su círculo íntimo, en los últimos días, de que tiene ganas de volver a ponerse la camiseta de Boca.Riquelme debía haber viajado esta semana a Porto Alegre para disputar el amistoso entre los amigos de Zidane y los amigos de Ronaldo. Hubiera sido un guiño a su desembarco en el fútbol brasileño, donde, según él, tuvo varios pedidos en este tiempo. Sin embargo, no fue. También se supo que desde que jugó su último partido como futbolista profesional hace 170 días (el 4 de julio pasado, en la final de la Copa Libertadores ante Corinthians), Román sólo recibió una oferta formal y por escrito: fue de Cruzeiro, impulsada por su amigo Juan Pablo Sorin, aunque después se frustró por un tema de avales.En los últimos días fue Palmeiras quien preguntó por él, pero incluso allegados al jugador confirman que hubo un "sondeo" y que no llegó nada por escrito."Sabemos de la conexión Bianchi y él, y esto puede influir en su elección. Pero vamos a tratar de explorar un sueño que siempre tuvo, para actuar en el fútbol brasileño. Queremos añadir nuestros intereses con los de Riquelme, aunque sabemos que es difícil sacarlo de allí", dijo un funcionario cercano al presidente Arnaldo Tirone, de Palmeiras, en declaraciones al portal globoesporte.com.Desde la primera reunión entre el presidente Daniel Angelici y Bianchi se supo que los dirigentes no le pusieron condicionamientos al Virrey ante un eventual retorno del enganche. Y César...