Lo disfuncional, al paroxismo

Tiernas criaturas / Autor: Gonzalo Senestrari / Intérpretes: Mathias Carnaghi, Andrés Ciavaglia, Verónica Intile, Norma Montenegro, Martín Salazar / Escenografía e iluminación: Adriana Rial / Música: Valentina Gonzáles / Producción ejecutiva: Débora Staiff / Dirección: Sebastián Sánchez Amunátegui y Gonzalo Senestrari / Sala: Teatro del Abasto, Humahuaca 3549 / Duración: 80 minutos / Nuestra opinión: buena.

Desde el estreno de La omisión de la familia Coleman, de Claudio Tolcachir, el teatro porteño independiente se ha visto monopolizado prácticamente por un único tema, y la comunidad de espectadores ha acompañado con recurrencia esta decisión. Todo gira en torno a la familia disfuncional, en una de las capitales internacionales del psicoanálisis. Y como si esto fuera poco, en la mayoría de los casos la estética elegida para hacerlo es la del realismo. Tiernas criaturas desde lo argumental se agregan a esa larguísima lista de espectáculos, pero felizmente no lo hace en lo que respecta a la estética, sin importar cuán logrado sea el resultado final.

En lo argumental lo "disfuncional" está llevado al paroxismo. Un hijo regresa a la casa familiar en busca de una vieja carta que le organice y justifique su presente y se encuentra con que su padre es gay y vive con su nueva pareja, su mamá (o la ex pareja de su padre) se ha mudado al cuarto de su infancia, mientras que en la habitación de huéspedes vive la hija de esa mujer que él llama mamá pese a la...