Por diferencias con Espinoza, se divide la CGT de La Matanza

A contramano de las versiones sobre una eventual unidad en la a nivel nacional y desatendiendo por completo el reciente mensaje del papa Francisco, la seccional de La Matanza de la central obrera quedará fracturada después de casi 30 años de estar unificada.El quiebre se oficializará la semana que viene, cuando el sector disidente al metalúrgico Carlos Gdansky plantee su desacuerdo sobre el alineamiento de la CGT con la gestión del intendente Fernando Espinoza.Entre los que orquestaron la ruptura, hay dos hombres que responden casi directamente a y a . Se trata de Luis Velázquez, jefe del gremio de los camioneros en el distrito, y de Julio Rubén Ledesma, referente del sindicato de comercio e integrante del equipo gremial del Frente Renovador.Detrás de ellos, se encolumna un grupo de gremios que son parte de la CGT moyanista. Pero Moyano se comprometió ayer durante un asado a gestionar el apoyo de las organizaciones que están enroladas en la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo."Estamos en desacuerdo con la gestión de Gdansky, que pretende una seccional política y que dice que está todo bien lo que hace el municipio. Hubo un conflicto en la cadena de supermercados Coto que provocó 400 despidos y no hizo nada", protestó Velázquez, que jugó políticamente en las últimas elecciones con el frente que crearon Moyano y Francisco De Narváez.Gdansky es el líder de la seccional de La Matanza desde hace décadas. Su mandato había finalizado en mayo, pero logró una prórroga hasta diciembre como una vía de escape momentánea para intentar mantener la unidad. Pero no habrá caso: la fractura ya es un hecho y...