El desafío de llevar el tema a la agenda política

Los emprendedores locales gozan de reconocimiento internacional "por su creatividad, profesionalismo y potencial para convertirse en empresarios de alto impacto", resume Silvia Torres Carbonell, del IAE. En el país, hay cada vez más consenso respecto de que "la actividad emprendedora debe estar en el centro de la agenda política del futuro", agrega. Pero no con el fin de que el Estado provea directamente los recursos, sino para que facilite los procesos y cree un marco que impulse a las nuevas empresas, con "reglas claras, respeto por la propiedad y oportunidades de inversión", completa la especialista.

En 2014, el escenario se complicó. Según Andy Freire, referente en el ámbito y cofundador de Quasar, hubo más dificultades para emprender. Freire sintetiza cinco problemas: "Un aumento de costos por inflación, que implica un desgaste en términos de negociación de precios, salarios y tarifas; una demanda inconsistente por el consumo en baja; una presión tributaria alta; una baja de las inversiones en el país, y un muy bajo nivel de crédito para pymes a tasas razonables". Todo esto, estima, seguramente disminuyó la tasa de emprendimientos, pese al enriquecimiento de la Red.

Hugo Kantis, de Prodem, indica que las nuevas empresas necesitan un crecimiento económico de largo plazo y previsibilidad. La falta de una política pro emprendimiento, opina, es lo que ubica al país lejos de los líderes del indicador de Condiciones Sistémicas para el Emprendimiento Dinámico que elabora la institución.

La contracara del entorno es que la asociatividad...