¿Están en decadencia los grandes salones del automóvil?

El Salón del Automóvil de París es, desde 1898, la mayor exposición de vehículos del mundo. De carácter bienal, se alterna con la megamuestra de Frankfurt (años impares) para mostrar al público y los especialistas, con todo el brillo y el glamour de las luces de los stands, dónde está parado y hacia dónde va el mundo de la industria automotriz en términos de diseño, novedades, tendencias, tecnología e ideas.

Por supuesto, las marcas francesas despliegan aquí sus mejores galas, con concepts de ensueño, como el Renault Trezor y el Citroën Cexperience, y con primicias como el fresco C3 y los Peugeot 3008 y 5008 (ahora SUV de pura cepa).

En tanto, las marcas alemanas (París es su casa en los años pares), intentan mostrar un cambio en su estrategia de productos venideros, basada hasta aquí en la mecánica diésel (vapuleadas tras el diéselgate de VW en Estados Unidos), presentando concepts eléctricos como promesas de inmediatos autos de serie.

Terreno éste en el que vienen rezagados detrás de la alianza Renault-Nissan, que domina el mundo de los eléctricos con el Leaf y el Zoe, que...