Críticas cruzadas por el rol de la Metropolitana

Los últimos días del juez federal Claudio Bonadio a cargo de la causa Hotesur estuvieron marcados por las acusaciones cruzadas entre el gobierno nacional, Mauricio Macri y la Justicia por el rol que tuvo la Policía Metropolitana -administrada por el jefe de gobierno porteño- en los operativos ordenados por el juez.

El lunes pasado, el magistrado, que ayer fue desplazado de su cargo por la Sala I de la Cámara Federal tras un pedido de nulidad de Romina Mercado, miembro del directorio de Hotesur, ordenó un operativo en las oficinas de Máximo Kirchner y del empresario Lázaro Báez, en Río Gallegos, como parte de un avance en la investigación por supuestas maniobras de lavado de dinero en la empresa que administra los hoteles de la familia presidencial.

Personal judicial y de la Policía Metropolitana se apersonaron en Santa Cruz con un pedido de presentaciones de los balances contables de la empresa para su peritaje correspondiente.

El accionar del Bonadio provocó fuertes críticas por parte de la presidenta Cristina Kirchner y de varios funcionarios del gobierno nacional, que acusaron al juez de impulsar la politización de la causa por haber ordenado un operativo de ese tipo a pocos días de las elecciones primarias nacionales.

El envío de medio centenar de efectivos de la Policía Metropolitana reforzó esos cuestionamientos. El oficialismo, incluso, acusó a Pro de pedirle al juez que disponga de esa fuerza para el operativo, a lo que Macri calificó de "vil mentira" y de una "fábula".

El precandidato presidencial por el frente Cambiemos también reaccionó a los embates y se desligó de cualquier responsabilidad en el envío de los efectivos, porque la Justicia tiene las facultades de ordenar la intervención de las fuerzas de seguridad que considere pertinente y, en este...