Conversos sin culpa

"Qué fácil que es arreglar los problemas cuando los tiene que resolver otro, ¿no?"

(Del cuento del martillo.)

Pasado mañana tendrá lugar el primer mensaje de Mauricio Macri en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso. Será el primero de un mandatario de otro signo después de 12 años de kirchnerismo. Una de las principales discusiones pasa por si Macri hará o no una radiografía de cómo el gobierno de Cambiemos ha recibido el país. Quienes sostienen que debe hacerlo se basan en que la ciudadanía tiene derecho a conocer el estado de la Nación para saber desde dónde se parte y escuchar después hacia dónde se quiere ir y cómo lograrlo. También sostienen que, de no ponerle los puntos sobre las íes al "relato", éste seguirá batiendo el parche sobre verdades incomprobables, que terminarían avaladas por la propia impericia o complicidad de quienes se anunciaron como una superación de la década ganada. Del lado del macrismo están los que prefieren no hablar más del ayer y los que pugnan por que Macri diga la verdad, que deje bien en claro el antes y el después.

Acá la verdad vendría a ser otra: si el nuevo inquilino de Olivos no se apura, los cristinistas arrepentidos lo van a dejar más indefenso que a Arrow sin flechas. Unos pocos datos ya marean: Diego Bossio jura que nunca fue kirchnerista, Miguel Pichetto perjura que Kicillof fue un mal ministro y hasta el propio Guillermo Moreno dijo del "chiquito" protegido de Cristina que la pifió con el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR