Comunicación y Política

• Autor: Rodolfo Capón Filas

En la madrugada del 17.09.2009 los diputados de la Nación cometieron una serie de errores procedimentales tan grandes que, si debieran rendir examen de Administativo o Constitucionales, serían reprobados.

¿Cuál era su apuro? Aprobar la Ley de Medios K, para que el Mago de Hoz gobernara para siempre. A tal punto es así que la Generala en Jefe ordenó a su tropa de Senadores aprobar la ley tal cual “sin cambiar una coma”.

Como es pronosticable que la orden de batalla será cumplida, tendremos la Ley de la Felicidad. Nunca más noticias tristes, nunca más pobreza, desforestación, medicamentos adulterados o vencidos, sindicatos co-optados, diplomas universitarios truchos, jueces corruptos. Nunca más narcotraficantes. Nubca más políticos "borocoteados". Todo será perfecto. Todo K.

Para siempre el Potro, Maradona, el desfile de modelos de la actual Presidenta, de su cuñada, de su hija, de su amiga. Porque esta ley busca adormecer la conciencia y proyectar la Dinastía K por los siglos de los siglos Amén.

Los K y sus seguidores mal-precian tánto al Pueblo que descuidan un dato importante: el Pueblo, verdadero sujeto de la Historia, sabe lo que pasa y algún día, más temprano que tarde, saldrá por sus fueros “con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes” como afirmara Juan Domingo...