Compartir el pan
Autor | Comité Editorial |
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Las espaldas dobladas. Todo pensar , es un pensar situado. ¿En qué lugar estarás leyendo estas líneas escritas desde esta orilla del imperio? ¿será de barro y dientes apretados? como crece la vida al borde de este Río de la Plata. ¿Será de miseria, resignación y cinismo? , como han logrado ”variar” la siembra de la vida aquí. ¿Por qué no detenemos el tiempo ante cada pérdida provocada por el “señor de los mercados y las guerras”?
Las pérdidas no son “cantidades” en las bolsas de comercio , ni las primeras planas de las cadenas de comunicación masiva , que cada anochecer son seleccionadas por “camisas almidonadas” también seleccionadas por generaciones de olvidos. No , son las espaldas dobladas de todos los que sostienen la existencia con el solo levitar de su dignidad. Son las incontables pérdidas , … las incontables vidas. Si tuvieras dudas de su importancia , imagínate que el azar del nacimiento te hubiera arrojado al mar de esta vida desde un útero , apenas unos metros distante al de tu “inexorable” madre. Imagínate , que tu fueras quien huele a basural y descarte ¿que sería de tus ojos y los ojos de tus hijos e hijas? De sus sueños , y de su boca sin pan.-
Son las incontables pérdidas , las incontables vidas. Nadie está a salvo ante su presencia ; la pronunciada curva de su harapo te ha de acompañar hasta el plástico somnoliento que representa tu tranquilidad. Hemos perdido la conciencia de nuestra obligación en la vida , y pronto perderemos la voz. El amo quiere que olvidemos a ese hermano y hermana , que nombra , con su sola presencia , al tiempo que habitamos. Quién domina el “espacio imperial” , sabe el por qué. Sabe que en ese encuentro y en el amor que desate , está el límite de su existencia.
La mayor espalda doblada es la de quien ha perdido la esperanza y cree que no puede cambiar nada. Les sucede a los elefantes criados en cautiverio.Pudiendo arrancar un árbol de un tirón, se quedan atados a un pequeño palo clavado en la tierra porque en su infancia sus fuerzas no alcanzaban para arrancarlo y ahora de adultos creen que no pueden. Aun el animal más poderoso y gigantesco, al tener grabado en su memoria el registro de la impotencia, aunque luego resulte anacrónico, no intentará librarse de esa atadura
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La industria que mas le interesa al poder. No es que la información que permita hacernos concientes de este “iter” social que convalidamos , no se encuentre al abrir las páginas de cualquier diario de tirada nacional. A veces, las cifras solo reflejan el dolor que ya conocemos. “El indicador de...
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