Para captar más clientes, una banda narco estudiaba en universidades privadas

Los roles, dentro de la empresa narcocriminal, estaban tan bien definidos que a algunos de sus integrantes les tocó la tarea de las "relaciones públicas" y, para lograr un mayor éxito, decidieron cursar carreras en universidades privadas para poder ampliar su cartera de clientes.Así actuaba una por la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal. En las últimas horas, la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado procesó a 14 sospechosos, en su mayoría ciudadanos colombianos.La investigación, que se hizo pública con una conferencia de prensa del , Sergio Berni, el 25 de junio pasado, fue bautizada "Operación Universitas".Según se desprende de la resolución de la jueza Arroyo Salgado, la banda narcocriminal operaba en el país desde, por lo menos, diciembre de 2013.Las personas investigadas, según consta en el expediente judicial, comercializaban éxtasis, cocaína, marihuana, cogollos de marihuana, flores de marihuana, cristal de MDMA (droga sintética) y una sustancia conocida como N-BoMe, diez veces más potente que el LSD."La organización en ciernes vendía en forma directa drogas ilícitas de diferente composición y cuantía a una importante cartera de clientes constituida principalmente por estudiantes de universidades privadas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires", explicó la juez Arroyo Salgado en su resolución, a la que tuvo acceso LA NACION.En su fallo de casi 100 páginas, la magistrada agregó: "En miras a consolidar la cartera de clientes que aseguraba la dinámica comercial de la empresa criminal, algunos de sus miembros tenían por función el desarrollo de las relaciones públicas, para lo cual se inscribían en diferentes carreras de grado en casas de altos estudios, con el propósito principal de captar grupos de consumidores afines a los productos ilícitos que comercializaban".Durante varios allanamientos hechos por los detectives de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, al mando del comisario inspector Néstor Roncaglia, se secuestraron 9980 pastillas de éxtasis de color rosa y con la forma y grabado de Hello Kitty, y 280 gramos de cristal de MDMA, entre otras drogas.La droga llegaba a la Argentina en encomiendas desde Europa, disimuladas y acondicionadas en cajas de juegos didácticos infantiles."La organización investigada a la par de comercializar las sustancias contrabandeadas al menudeo, principalmente entre el alumnado de casas de altos estudios, también las vendían a gran escala a eslabones delictivos que -a su vez- las...