Las claves de los cambios aplicados en Brasil

Cambios en los esquemas de contratación y despido, reducción en las contribuciones sindicales, privilegio de las negociaciones sectoriales o por empresa, modificaciones en materia de litigios y reglamentación del teletrabajo son algunos de los atributos presentes en la reforma laboral que fue aprobada en Brasil y sobre la cual se inspira el Gobierno.

La iniciativa fue impulsada por el presidente Michel Temer, y luego de su aval en la Cámara de Diputados en abril finalmente fue aprobada en el Senado en julio. El objetivo de la reforma, que fue apoyada por empresarios y resistida por sindicatos, es aumentar la competitividad de la economía y reducir los costos laborales, flexibilizando normas y reglamentaciones laborales vigentes desde mediados del siglo XX.

La reforma laboral brasileña eliminó la obligatoriedad de la contribución sindical, que pasó a ser voluntaria. Equivalía a un día de salario por año. Se impulsan las negociaciones y los acuerdos salariales sectoriales, por empresa o individuales, que tienen mayor peso que los convenios colectivos o los arreglos entre los empleadores y los sindicatos.

A su vez, cada empresa puede negociar salarios y otros rubros vinculados con las condiciones laborales con comisiones o representantes de los trabajadores que no necesariamente cuenten con representación o aval sindical.

Se reglamentó el teletrabajo (homeworking) y se introdujo un esquema de reembolso de gastos para el trabajador. Además, se ampliaron las posibilidades para las empresas de tercerizar tareas que ahora puede alcanzar incluso la actividad principal de la compañía.

Despidos y litigiosidad

La reforma relajó las condiciones para que...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR