El Ciclón se juega casi todo en un partido

San Lorenzo atraviesa una situación especial. Es el líder del torneo local y el domingo próximo se enfrentará con River, en Núñez, con la convicción de escaparse de sus poderosos perseguidores. Sin embargo, la cabeza está en otro lado. En la Copa Libertadores, precisamente. El defensor del título se enfrentará hoy con San Pablo, por la cuarta fecha del Grupo 2, en un encuentro decisivo para la clasificación a los octavos de final. Si no gana, quedará muy comprometido su futuro. Será una suerte de bisagra para lo que resta en el semestre: un buen resultado será esencial para lo que vendrá, en ambos frentes. El match se disputará en el Nuevo Gasómetro, frente a una buena concurrencia, desde las 19.45, con el arbitraje del chileno Enrique Osses.

San Lorenzo, que se ubica tercero con tres puntos, necesita una victoria para seguir dependiendo de sí mismo. Su rival, que el 18 de marzo le ganó por 1 a 0 casi en el final, en el estadio Morumbí, tiene 6 unidades y escolta al líder Corinthians (9), el otro equipo brasileño, que avanza a paso firme hacia los octavos y que, desde las 22, chocará con Danubio para cerrar la clasificación.

Según el Patón Bauza, el segundo pasaje se resolverá en una suerte de mano a mano entre el Ciclón y el equipo paulista, que lleva ventaja. Desde que la copa se disputa con el formato de 32 equipos, sólo dos campeones defensores no pudieron superar la primera etapa: Inter, de Porto Alegre, en 2007, y Liga de Quito, en 2009.

Podrá contar con el apoyo del público, luego de la goleada por 4 a 0 contra Lanús, por el torneo doméstico, que fue a puertas cerradas y, además, luego de cumplir la sanción de disputar el partido sin gente ante Corinthians, cuando cayó por 1 a 0, penalización que tenía pendiente de la final con Nacional, de Paraguay, de 2014.

"Tenemos que reventar el estadio. Si sos cuervo, no podés faltar", afirmó Marcelo Tinelli, el vicepresidente, a través de su cuenta de twitter. El equipo que dirige el Patón está en...