El cepo cambiario avivó una encendida discusión entre economistas y empresarios

La idea de los organizadores era equilibrar, con tres economistas presuntamente menos distantes del kirchnerismo, aquel panel que, hace un mes, centrado en tabúes como la posibilidad de un "ajuste", cayó como . Pero salió otra cosa: Miguel Bein, Javier González Fraga y Agustín D'Attellis, los tres invitados de ayer por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp), que conduce Eduardo Eurnekian, se trenzaron en una interminable discusión que se trasladó al público, nunca tan bullicioso en el hotel Alvear. Una versión compendiada de lo que, seguramente, vendrá después de las elecciones.

Por momentos pareció un programa de debate televisivo. "No quiero convertir esto en Intratables", se excusó José Del Rio, periodista de LA NACION que hacía de moderador. Lo medular de la charla, cómo generar divisas en tiempos de restricción externa, tuvo una sola coincidencia: cayó la inversión y hay que revertirlo si el país pretende volver a crecer. ¿De qué modo? Para D'Attellis, mediante el consumo y la reafirmación de un "proceso de industrialización". Según González Fraga, mejorando la productividad a través de la resolución de cuestiones como el default porque, dijo, "se agotó la política de crecer sobre la base del consumo". Lo de Bein fue un camino intermedio: con inversiones productivas, bajando retenciones y rechazando la tentación de endeudarse sin límite.

Los organizadores venían con culpa. Un día después del panel anterior, cuando Miguel Ángel Broda, Carlos Melconian y José Luis Espert discutieron cómo ajustar las inconsistencias económicas, debate que motivó ironías de la Presidenta y perplejidad en el programa oficialista 6,7,8, Eurnekian se reunió con sus pares y planteó la idea de equilibrar la atmósfera. Es probable que lo consiga con creces recién el 1° del mes próximo, cuando se concrete la invitación que acaba de aceptar Axel Kicillof. Ayer, como preparación para lo que todos ellos esperan de ese mesías multifunciones de la administración que es el ministro de Economía, D'Attellis ofició de precursor: fue la voz que gritó en el desierto de una audiencia que, ante cada una de sus alocuciones, murmuraba desaprobación.

"Ya sé, Agustín, que no es fácil resolver el tema de los holdouts, pero sentarse a resolverlo debería ser el objetivo -le dijo González Fraga-. Es central. Estoy de acuerdo con el desendeudamiento, pero no con el exceso de desendeudamiento: si tuviéramos la deuda en 30% del PBI como Brasil o Chile, con la misma...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR