A la caza de las nuevas bandas

Hubo un tiempo en que los concursos de bandas no estaban bien vistos en el rock, y sí caminar el under y subir peldaños de a poco. Pero siempre los hubo. El periodista Claudio Kleiman, crítico de rock y espectador de la escena local desde sus comienzos, recuerda el concurso del Festival Nacional de la Música Beat, en 1969. "Lo ganó La Barra de Chocolate (el grupo de Pajarito Zaguri) con el tema «Alza la voz», que después fue un minihit", señala Kleiman y también recuerda que en Pinap, el primer festival masivo de rock al aire libre, hubo un certamen que consagró a Extraña Dimensión, un grupo del que luego poco se supo.En los últimos años se multiplicaron los concursos de música en general y de rock, y por estos días se cuentan por decenas. Promovidos por la Nación, la provincia y la Ciudad de Buenos Aires, por intendencias o por marcas vinculadas a la música, están generando un cambio de paradigma. Hasta aquí las bandas creaban su propio universo, se hacían fuertes puertas adentro y luego salían al ruedo no para competir con sus pares sino para establecer con algunos de ellos aspectos en común: generacionales, estéticos, ideológicos. La competencia, en todo caso, era con uno mismo. Ante un panorama que hace cada vez más invisible a los grupos nuevos o que los convierte en revelación a la década de vida (el caso más reciente es el de Tan Biónica), el anotarse en un certamen, poder tocar con músicos consagrados o ganar la posibilidad de que alguien costee y difunda su disco, es una alternativa que hoy muchos tienen en cuenta.Más de mil bandas se anotaron en RockeaBA y también pasó esa cifra la segunda edición de Maravillosa Música. La primera es una iniciativa de la provincia de Buenos Aires y la segunda de Nación y ambas buscan promover el desarrollo de los músicos jóvenes e incluir a las nuevas bandas en las grillas de los festivales itinerantes que organizan o en espacios como Tecnópolis.El lunes pasado, en La Plata, finalizó RockeaBA, concurso del que salió ganadora la banda de hip hop Zulú. El ex baterista de Soda Stereo, Charly Alberti, fue el presidente del jurado y celebra tanto la iniciativa como su experiencia. "Nunca había participado en algo así porque soy medio reacio a los certámenes, pero lo que me atrajo de éste es la edad de los convocados (de 16 a 25 años), es la etapa en la que potenciales buenos músicos dejan de intentarlo y se dedican a otra cosa. Porque la familia les compra la batería o la guitarra, pero, por lo general, siguen...