Cartas de los lectores

Equidad distributiva

Legisladores nacionales y jueces se han otorgado aumentos y percibirán de bolsillo 95.000 y hasta 300.000 pesos, respectivamente. Mientras tanto, los más de tres millones de caranchos jubilados con la mínima de la Anses perciben menos de 7000 pesos mensuales y deberán esperar hasta septiembre para que gracias a la ley de movilidad les sea otorgado aproximadamente el 15%. ¿Es realmente un ejemplo de equidad distributiva o es una vergüenza?

Beni Cotler

mailto:proyectostierrasanta@gmail.com

Honores

Antes, los visitantes ilustres que llegaban a nuestro país rendían honores a nuestro héroe máximo, el General San Martín, una práctica que suele hacerse en todo el mundo con los padres fundadores. Ahora cambiamos. ¿Por qué?

Nicanor E. Sosa Quintana

DNI 4.091.831

Caso Odebrecht

El caso Odebrecht está introduciendo en la Argentina dos novedades no contempladas en nuestra ley para descubrir y castigar la trama de megacorrupción que esa empresa reconoce haber estructurado. La primera es la que se hizo conocida en los Estados Unidos en la crisis de 2008, cuando el gobierno salió al rescate de los grandes bancos con diferentes medidas con el argumento de "too big to fail" (muy grande para quebrar). Este lema es perverso por naturaleza y se aleja de un sabio principio del capitalismo, que es la quiebra para quien por sus errores o delitos termine en la insolvencia. En los EE.UU. la quiebra de los grandes bancos podía tener, según se argumentó, un efecto dominó o sistémico en toda la economía, y de allí la justificación del rescate. Pero ¿cuál es el riesgo de la quiebra de Odebrecht o de la anulación de sus contratos? Por otra parte, parecería que los gobiernos se inclinan en estos grandes casos de corrupción corporativa por la aplicación de grandes multas a los bancos o empresas cuya quiebra se evita, y permitir así que sigan trabajando? ¿o delinquiendo? La solución de pagar por actuar mal es peligrosa y debe ser cuidadosa y excepcionalmente aplicada. En primer lugar, porque las multas se negocian en forma discrecional y no muy transparente, cosa que está levantando legítimas protestas en los EE.UU. En segundo lugar, porque si el pago de dinero es la forma de seguir en actividad, las posibles multas pueden pasar a ser parte de los riesgos calculados a incluir en los costos y también en los precios. Da la impresión entonces de que todo se va reduciendo a cumplir solamente el undécimo mandamiento no escrito: "que no te agarren".

Horacio...