Cartas de los lectores

TERQUEDADCon orgullosa terquedad la presidenta Cristina Kirchner dijo defender los intereses ambientales de la Argentina frente a Uruguay. Nada de novedoso hay en esa afirmación ya que todo, o casi todo, se maneja de esa forma. Lo llamativo es que en estos tipos de conflictos no es necesario la terquedad ni la obstinación, sólo se precisa del sentido común y saber que todo debe encaminarse al bie-nestar de ambas naciones. El diálogo sincero y sin condiciones parece ser la vía para solucionar el conflicto bilateral, no el monólogo demagógico pronunciado desde un atril.José Luis Traversomailto:valdanito@hotmail.comMÉTODOSSería de desear que en un futuro no muy lejano tanto la Anses como el Banco Central, imitando los métodos de los denostados fondos buitre, reclamaran al Ministerio de Economía por los "pagadioses", perdón, pagarés, que reciben a cambio de la apropiación de sus recursos... que son los nuestros.Julio DevotoDNI 8.249.633PRISIONES MILITARESAl fiel reflejo del ánimo vengativo que exhiben los tribunales en los procesos vinculados a los crímenes de lesa humanidad, bien señalados en el editorial del jueves pasado, debe recalcarse la prolongación indefinida (tan onerosa para el fisco) de los mismos. Esas prolongaciones agravan los padecimientos de las personas de edad avanzada (hay quienes superan los 80 años), sin sentencia firme y sin que siquiera se les conceda prisión domiciliaria. Amén de aquel designio vengativo, ¿no queda revelada la pérdida de credibilidad del sistema judicial penal?María Mercedes T. de HelmanL.C. 3.450.681POR EL RESPETOReprobamos el comportamiento de los alumnos del Nacional de Buenos Aires, que además de tomar el colegio y no permitir su normal funcionamiento, profanaron la iglesia San Ignacio de Loyola. Es claro que este tipo de conducta está sostenida por padres, que utilizan a sus hijos para ser notables o lograr que sus hijos sobresalgan. Lo lograron. Con respecto a la autoridades del colegio, aceptamos la denuncia en la fiscalía, debido a que la conducta de los jóvenes superó el ámbito escolar. Pero también evidenciamos fallas groseras en cuanto a la enseñanza y al aprendizaje de los derechos y deberes de los ciudadanos y de la noción básica de respeto. Consideramos también que la misma conducta seguida tiempo atrás en el altar mayor de la Catedral Metropolitana por la señora Hebe de Bonafini, ícono de las madres de Plaza de Mayo, ha sido el ejemplo para estos jóvenes. Consideramos que se educa también con...