Por el aumento del delito cambian a 90 jefes policiales bonaerenses

LA PLATA.- Presionado por la necesidad de mostrar resultados positivos en la lucha contra el delito, el ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, cambió ayer a 90 jefes policiales de algunas de las zonas más calientes del conurbano y del interior de la provincia, donde cada día vuelven a recrudecer la violencia, los robos, las entraderas y el tráfico de drogas. Justamente, según se informó en fuentes cercanas a esa cartera, en esos sitios Granados colocó a "hombres de su extrema confianza".Los principales cambios fueron impulsados en las Jefaturas Departamentales y en las Jefaturas de la Policía Distrital que funcionan en ciudades con más de 70.000 habitantes y donde la inseguridad ha generado la reacción de los vecinos. En el conurbano, por ejemplo, hubo relevos en municipios como La Matanza, donde en tan sólo ocho meses hubo 39 homicidios; en Lomas de Zamora, donde se multiplicaron los enfrentamientos armados con la policía; en Morón, donde la semana pasada una adolescente de 15 años falleció en el patio de la escuela, víctima de una bala perdida en un tiroteo entre policías y ladrones; además de las zonas que comprenden los partidos de Moreno y de Presidente Perón.Para algunos de estos cargos, según trascendió, Granados seleccionó personalmente a hombres de su extrema confianza, con los que había trabajado en Ezeiza cuando era intendente. Tal es el caso del comisario inspector Walter Golia, que se hizo cargo de la Jefatura Departamental de La Matanza, o del comisario mayor Marcelo Freyre, que se desempeñaba en la comisaría 1a. de Ezeiza y ahora fue designado para comandar la caliente Jefatura Departamental de Lomas de Zamora.También en La Plata fue reemplazado el jefe distrital, donde en los últimos meses la inseguridad ha golpeado con fuerza la zona norte con una serie de 15 entraderas en las localidades residenciales de Gonnet, City Bell y Villa Elisa.En el interior de la provincia, el cambio más sustancial por jerarquía fue en la Superintendencia de Delitos Rurales. Allí fue designado otro hombre de confianza del ministro: el comisario general Enrique Salcedo. Un estrecho colaborador de Granados reveló a LA NACION que este movimiento fue uno de los que más preocupó al titular de la cartera de Seguridad. "Quería reforzar la seguridad en la zona de Cañuelas, para mantener la tranquilidad que hasta ahora se vive en partido de Ezeiza", dijo la fuente.Los números del delitoSi bien los movimientos y designaciones fueron publicados esta semana...