Un camarista negó cargos en el Consejo

El camarista federal de Bahía Blanca Néstor Montezanti declaró ayer ante el Tribunal de Enjuiciamiento de Magistrados en el tramo final del juicio político que enfrenta por su presunta vinculación con la Triple A. La audiencia empezó a las 10 y duró todo el día. Montezanti dijo que hubiera podido renunciar en forma "discreta", jubilarse y evitar los cargos en su contra -que consideró disparatados-, pero dijo que había optado por defenderse.

Las acusaciones en su contra incluyen "haber desplegado conductas palmariamente incompatibles con la vigencia de los derechos humanos", "falta de idoneidad moral y de vocación democrática" y "haber exteriorizado comportamientos indecorosos, arbitrarios y despóticos en relación con sus colegas, subordinados, auxiliares de justicia, alumnos, denunciantes".

Quien lo llevó a juicio político fue el Consejo de la Magistratura, que aprobó el dictamen acusatorio con los votos de 11 de los 13 consejeros (lo votaron oficialistas y opositores). Además, el Consejo dispuso el año pasado su suspensión. El impulsor del dictamen contra Montezanti fue el entonces consejero Julián Álvarez, el último secretario de Justicia del kirchnerismo.

Hoy, quien oficia de acusador en este jury es el abogado Miguel Piedecasas, radical y actual presidente del Consejo de la Magistratura.

Antes de ser suspendido, Montezanti era el presidente de la Cámara Federal de Bahía Blanca. En esta jurisdicción se investigan acusaciones por facturación falsa contra el empresario Lázaro Báez, socio de los Kirchner. Juan Suris, a quien Montezanti le confirmó el procesamiento, habría emitido -a través de un entramado de sociedades- facturas falsas, algunas de las cuales fueron utilizadas por empresas de Báez. Quienes lo defienden sostienen que la acusación contra Montezanti tiene que ver con este caso.

En paralelo con este jury, el camarista enfrenta una causa...