En busca de los pasos perdidos

Tuvo que insistir mucho mi médico, pero al final le hice caso. Empecé a caminar. A paso rápido y durante una hora, ese era todo el plan. No parece gran cosa. Pero cuanto más me esmero por hacer actividad física, con más facilidad encuentro sólidas excusas para postergar todo el asunto.Después de darle muchas vueltas, me di cuenta de que la única forma en que podría mantener una rutina diaria de ejercicio era tomarme por sorpresa. Suena raro, pero tenía un plan. Ahí va.Me levanto muy temprano y mi mente tarda bastante en arrancar. Así que hace un mes dejé las zapatillas a mano, y al día siguiente, sin pensarlo dos veces, me vestí con ropa adecuada, me calcé y salí a la calle. Media hora después había descubierto al menos tres cosas.Primero, que el sistema funcionaba. Nada de desayunar o permitirle a mi cabeza encontrar pretextos. La fórmula era saltar de la cama a la calle, casi literalmente.Segundo, el porqué de la insistencia de mi médico. El sedentarismo -voy a ser directo- te mata. Solo había marchado 30 minutos a 6 km/h, y sin embargo me sentía como si hubiera escalado el Everest en ojotas y marcha atrás. No había sido capaz de caminar siquiera durante una hora. Ese día, mientras recorría los últimos metros a paso lento, me apostrofé con vehemencia. Porque había sido una bofetada. No estaba cansado ni nada. Bueno, un poco, claro, pero podría haber hecho otro kilómetro; solo que mis piernas pedían basta. "Basta, en serio, no es gracioso", clamaban. El hecho espeluznante era que el confortable sedentarismo me habían convertido, de un modo lento y subrepticio, en alguien incapaz de caminar a paso rápido durante más de media hora.Tercero, y al revés de lo que anticipaba, el abrazar tan de repente la actividad física no me había puesto de mal humor. Todo lo contrario.En los días siguientes ocurrieron varias cosas interesantes. Para empezar, en algo más de una semana logré llegar a mi meta original: una hora a unos 6,4 km/h (no me pidan más por el momento). Y pude luego sostener ambas marcas.Le...

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