Buenos Aires perdida: un antiguo teatro demolido donde se estrenaron obras de renombre y una tragedia opacó una gran escena

La sala teatral funcionó en Carlos Pellegrini 248

Si bien hoy la conocemos en todo su esplendor, la Avenida 9 de Julio se inauguró con tan solo cinco cuadras, desde Bartolomé Mitre hasta Tucumán, el 12 de octubre de 1937 . Fue un día de festejos al que asistieron el intendente de la ciudad, Mariano de Vedia y Mitre, y el presidente de la Nación, el general Agustín Pedro Justo. Desde un palco próximo al recientemente inaugurado Obelisco (1936), Justo pronunció un discurso en el que destacó a la arteria como signo del pujante desarrollo y del asombroso progreso. La celebración incluyó la suelta de unas mil palomas blancas, además de bailes y orquestas en vivo que se extendieron hasta el anochecer, momento en que todos quedaron maravillados con la iluminación de la flamante vía.

En la primera etapa de construcción de esta colosal avenida que cambiaría la fisonomía del centro porteño, se tiraron abajo numerosos edificios : uno de ellos fue el perteneciente al Teatro de la Comedia. Bien lo describe el historiador y poeta uruguayo Ricardo M. Llanes en su libro Teatros de Buenos Aires, publicado en 1968: "El trazado y realización de la Avenida 9 de Julio produjo, como era natural, la desaparición de no pocos edificios antiguos y salas de espectáculos cuyas estampas se consideraban familiares del conocimiento popular". Enumera luego algunas de las casas teatrales que quedaron reducidas a escombros, como el mencionado Teatro de la Comedia o Teatro Comedia y Del Pueblo (en Carlos Pellegrini 248 y 340, respectivamente); el de Mayo, y los llamados Sarmiento y Buenos Aires, que se levantaban casi mirándose en la calle Cangallo (ahora Teniente General Juan Domingo Perón), dado que ocupaban, respectivamente, los solares número 1040 y 1053.

El estilo era el de un teatro muy característico del modelo italiano, con una planta baja y un primer piso...