El brillante ataque de Ellerstina contra el corazón de los Heguy

Lo de Facundo Pieres parecía de a ratos una prueba de ésas de tipo y aptitud, conduciendo caballos en velocidad o en zigzag como si fueran prolongaciones de su cuerpo... pero haciendo goles. Lo de su hermano Nicolás era un vendaval de ataque pero con la camiseta defensora del back. Lo de Eduardo y Alberto Heguy, una muestra del carácter competitivo y la pasión que tienen los Heguy por este deporte, aun en inferioridad de condiciones.Lindo, lindo partido el que sostuvieron Ellerstina Piaget y Chapaleufú Lange, que inauguraron el Argentino Abierto con un 23-14 favorable al equipo negro. El espectáculo no defraudó a los que hicieron el esfuerzo de concurrir temprano a Palermo, dejando a medias o directamente trunco el almuerzo. Es cierto que la tarde de sábado, soleada y templada, invitaba a ir a ver polo a La Catedral. Y aunque le faltó la emoción de un desenlace a palo y palo, el encuentro inicial de la Zona A fue un gusto para los espectadores que cubrieron enteras las tribunas de Libertador y a medias las plateas de la cancha Nº 2.Fueron a ver el debut del campeón defensor, o el especial regreso de tres Heguy al Abierto tras un año de ausencia, o ambas cosas. Se sabía que no sería parejo el tema, que Ellerstina era amplio favorito y que debía tener encendidas las antenas luego de un par de actuaciones defectuosas en Hurlingham. Y que Chapaleufú, aunque estuviera en su presentación absoluta en el Argentino como club sin su histórica combinación con Los Indios, iba a tener a Pepe y Ruso Heguy y su primo Bautista con muchas ganas de volver al ruido mayor, de ser parte nuevamente de la elite polística.Salió en un cotejo de nada menos que 37 goles en los mimbres (24 de jugada) y buen polo en general. Sorprendió Chapaleufú en el comienzo, jugando mano a mano y estableciendo un 2-1 en un primer parcial que vio caídas de Gonzalo Pieres (h.) y Mariano Aguerre. El Ellerstina conocido apareció en el segundo, con un apabullante 5-0 y goles de ésos que parecen fáciles cuando La Z logra abrir el juego y correr. Cierto es que su adversario le dio una mano, cometiendo equivocaciones en salidas, facilitando contraataques y cayendo en alguna distracción táctica.Después, Chapaleufú cerró el grifo de los obsequios y el campeón tuvo algunos baches de ésos por los que...