Boca ataca mejor, pero todavía da ventajas atrás

Boca hace esfuerzos para despegarse de la imagen del semestre pasado. Al cambio de nombres pretende agregarle un rendimiento distinto, más sólido atrás y con mayor elaboración adelante. La renovación no está dando aún los frutos deseados, pero la búsqueda está. Y ayer, en la victoria ante Rafaela 2-1, potenció las mejorías ofensivas de las primeras dos fechas, aunque (en el primer tiempo) mantuvo algunas dudas y le dio a Atlético ventajas que ya había entregado ante Belgrano y Newell's.La Bombonera necesitaba una muestra de actitud no sólo desde el empuje, sino también desde el entendimiento que podían tener entre los actores principales de un protagónico que todavía es ensayo. Se pensaba que una larga pretemporada y los retoques de nombres podrían modificar la estructura pasada en forma más determinante, pero no fue así. Carlos Bianchi se plantea interrogantes y busca responderlos más allá de lo que le dicen los resultados. El DT sabe que por más que la cuenta dé dos partidos ganados de tres Boca tiene que mejorar bastante si pretende ser candidato.Por lo que pasó ayer ante Rafaela y tomando también como referencia lo vivido en Córdoba y ante Newell's, se puede afirmar que Boca ataca mejor que el semestre anterior, aunque todavía da ventajas atrás.Desde lo positivo, vale destacar que fue el partido donde más (y mejor) se entendieron Juan Román Riquelme y Juan Manuel Martínez, dos de las tres piezas que componen el ataque en forma directa junto con Blandi. Juntos participaron de la acción del gol de Insúa, pero antes también habían generado sociedades, como el pase que le pincha Román al Burrito a la espalda de los centrales en el primer tiempo y que termina con un zurdazo poco eficaz del delantero. Martínez se esfuerza, aunque no recibe guiños del destino, de esos que ayudan a los jugadores a conectarse con la red. Porque ayer, cuando la mano venía medio torcida, tomó la pelota en posición de enganche, aceleró y remató desde afuera con fuerza y dirección, pero la pelota dio en el ángulo derecho de Conde. Algo parecido le había pasado con Colón el torneo pasado, aunque después terminó haciendo el gol del triunfo. Ayer no se anotó en la red, pero ese remate -lejos de desanimarlo- le dio una inyección de desequilibrio que el equipo le agradeció.Hubo chispazos de buen juego, indicios que pueden presagiar un futuro mejor en el ataque. En ese ítem los laterales siguen siendo clave: porque Marín, y sobre todo Insúa, van. Intentan abrir la cancha para ser una...