El BCRA, otra fuente de empleo masivo

El Banco Central (BCRA) se sumó a la ola de nombramientos indiscriminados de empleados que llegó a distintas áreas de la administración pública nacional en los últimos tiempos, cuando se aproxima el fin del mandato de Cristina Kirchner.

Desde hace sólo siete meses, cuando Alejandro Vanoli asumió la conducción de la entidad, ésta amplió casi 10 por ciento su plantilla, en consonancia con lo que ocurre en otras reparticiones estatales. Y entre los incorporados figuran su hijo y la actual pareja de Vanoli.

Las designaciones suelen quedar reflejadas en el Boletín Oficial como resoluciones o decretos administrativos, con una particularidad: para poder concretarlas recurren a excepciones a las condiciones de ingreso que fija el Sistema Nacional de Empleo Público (Sinep), ya que se trata de personal sin la calificación formal mínima requerida para el ejercicio del cargo.

Para facilitar las nuevas designaciones, el BCRA dispuso en marzo una tardía readecuación de las normas laborales generales que, en los hechos, acortó a la mitad los plazos de confirmación del nuevo personal.

De esta manera, quedarían en condiciones de continuar en funciones tras el cambio de gobierno o la nueva administración enfrentaría el brete de asumir un elevado costo presupuestario si intentase prescindir de ellos en un eventual intento de desplazar a Vanoli (con mandato hasta 2016) del cargo.

"Lo que se hizo fue adecuar el sistema de ingreso al artículo 2 de la ley 25.877, que modificó el artículo 92 bis de la ley de contrato de trabajo, ya que el Banco Central se rige por ella y no por la ley de administración pública", dijeron desde la entidad a la nacion. Esa ley, promulgada en marzo de 2004, acota los denominados períodos de prueba para evitar posibles abusos del empleador al respecto.

Pero hasta ahora el BCRA se había regido, ante las facultades que le concede su propia Carta Orgánica como entidad autárquica del Estado, por su propio estatuto del personal (artículo 15 de esa norma).

La situación varió a fin de marzo, cuando, en una hermética reunión, su directorio avanzó en la readecuación para flexibilizar sustancialmente las condiciones de ingreso.

Así se pasó de un sistema que obligaba al nuevo personal a superar poco menos de dos períodos semestrales de prueba antes de quedar confirmado a otro que deja los nombramientos en firme tras dos períodos, pero de tres meses...

La adecuación fue exaltada por el propio Vanoli en un encuentro que mantuvo con personal...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR