Barcelona cayó en su fortaleza y abre el juego

BARCELONA.- El Camp Nou no salía de su asombro. Valencia, dirigido por el hispano argentino Juan Antonio Pizzi, vencía por 3 a 2. El resultado suponía el fin de 31 partidos (25 victorias) de imbatibilidad culé ; el marcador imponía un correctivo para un equipo que, si bien tuvo el regreso de Lionel Messi como goleador -marcó, de penal, el transitorio 2 a 2- no supo cómo hacer para retroceder sin que le hicieran daño. Y defendió casi como un conjunto de aficionados.La derrota puede tener efectos colaterales para Barcelona, ya que si hoy ganan Atlético de Madrid (recibe a Real Sociedad) y Real Madrid (viaja a Bilbao para jugar con Athletic) lo superarán en la tabla de posiciones. Y por primera vez en las últimas 59 jornadas de la liga española, los catalanes no aparecerían en el primer puesto de la tabla de posiciones.Barcelona contó con los argentinos Javier Mascherano y Lionel Messi desde el arranque. En Valencia, sólo comenzó Pablo Piatti, aunque sobre el final ingresó Federico Cartabia. En los bancos de suplentes, Martino y Pizzi.El comienzo fue de los locales, que pronto se pusieron en ventaja gracias a un gol del chileno Alexis Sánchez, quien quizá sea el acierto más grande del Tata desde que llegó a España. El entrenador ha sido fundamental para que el llamado "Niño Maravilla" recuperara su instinto goleador y, con él, el sitio en el equipo titular que había perdido.Pero Barcelona caminó muy mal la cancha. Al contrario de otros partidos, le costó recuperar la pelota cuando la perdió. Y Valencia supo cómo hacer para lastimarlo por las bandas (el argelino Feghouli fue fundamental). De una de esas internadas de Feghouli llegó la igualdad, señalada por Daniel Parejo, un ex canterano de Real Madrid.Esa conquista de los visitantes debió alertar a los locales, pero no. En el segundo tiempo volvieron a mostrar las mismas grietas defensivas, llevadas al extremo en el gol de Pablo Piatti, un cordobés formado en Estudiantes de La Plata que, con su 1,63 metros le ganó en las alturas al brasileño Dani Alves (1,73 metros) y marcó el segundo gol del partido. A esa altura, el Nou Camp no tenía dudas: la del sábado 1º de febrero no sería una buena tarde.Pero a...