Argentinos, tres años cuesta abajo

Para un director técnico tan pasional y sanguíneo como Pedro Troglio, rasgos que se acentúan cuando le toca dirigir a su querido Gimnasia, debe haber sido todo un esfuerzo el acto de contención de emociones que hizo con los goles en el 2-0 sobre Argentinos.El respeto por el momento que atraviesa el rival se imponía sobre la alegría propia. No era una impostura. Troglio, en retrospectiva, representa lo último bueno que vivió Argentinos y también el comienzo del derrumbe, de las tres temporadas a los tumbos antes de caer definitivamente a la B Nacional. Con Troglio, el Bicho terminó 4°, con 30 puntos, en el Clausura 2011, el torneo previo a los seis que comprenden el actual período para los promedios que ya lo condenaron. En el Apertura 2011, el primero de este vía crucis de Argentinos, Troglio se fue tras la 7a fecha, cuando la decadencia y las malas decisiones en lo futbolístico se acumulaban. A solo un año de ser campeón con el "Bichi" Borghi, el éxodo debilitaba cada vez más al equipo. En ese mercado de pases de mediados de 2011, se fueron Mercier y Gentiletti. Antes había emigrado Ortigoza. Sin esa dupla Mercier-Ortigoza que ahora hace ilusionar a San Lorenzo, Argentinos se quedó sin motor, sin rumbo.Las tres temporadas del descenso consumieron seis DT (Troglio, Gorosito, Astrada, Schurrer, Caruso Lombardi y Borghi) y tres interinatos (Borelli, Mayor y De Sarrasqueta). La fatalidad también hizo lo suyo: cuando Gorosito comandaba una gestión aceptable (45,25 por ciento de eficacia), un accidente de tránsito lo obligó a irse. Lo más ruinoso fue el paso de Schurrer: seis derrotas y un empate en siete partidos.Los números deficitarios fueron confirmando la errada política en la conformación de los planteles: J. J. Morales, Balsas, Bordagaray, Pérez Tarifa, Germán...