La Argentina es inviable sin trabajo genuino

El trabajo dignifica… y también nos permite como sociedad encausarnos en una vida ordenada y previsible; sirve como un elemento dinamizador y estabilizador de la economía, desapareciendo el fantasma de la licuación del poder adquisitivo de los salarios y el volver a pensar en el ahorro familiar. Pero la realidad nos muestra un panorama totalmente distinto y caótico, producto de la voracidad de un Estado que no admite ajustar sus gastos, apelando a la emisión monetaria espuria y a la creación de más impuestos que desalientan la inversión y retraen aún más la producción, con la consecuente pérdida de puestos de trabajo.

En nuestro país 18,8 millones de argentinos son pobres (4 de cada 10 personas), 5 millones son indigentes (1 de cada 10). La mitad de los argentinos están con salarios que los sitúa, a pesar de tener trabajo registrado, por debajo de la línea de la pobreza, y lo más desalentador para ellos es percibir por salario montos menores respecto de quienes solo cobran planes sociales sin contraprestación alguna.

Hoy resulta más beneficioso, en un contexto de desgracia económica, ser poseedor de un plan social que apostar por la dignidad del trabajo . Una realidad perversa que degrada y somete a los argentinos a vivir de la limosna del Estado, con lo que esto conlleva … la cosificación de las personas; las que son tratadas como elementos de choque en las calles y llevadas a cuanta manifestación se requiera sin que sepan para qué. Se ha desvirtuado tanto el sentido del "trabajo" que ellos consideran hoy, que cortar una calle o asistir a una manifestación "Es trabajar" y lo toman como tal, van a los acampes y manifestaciones no por voluntad propia, sino para no caerse de las listas de beneficiarios de los planes sociales.

Batalla cultural. El comienzo del cambio es indispensable para cerrar la grieta y solo pensar en crecer como país; el cambio de paradigma en las Instituciones sociales es imprescindible: sindicatos y organizaciones de base deben comprender que lo hecho hasta el momento solo sirvió para sobrevivir, no para crecer, que la ideología de "combatiendo al capital" nos generó un mundo de desconfianza de quienes con reglas claras deberían haber sido nuestros socios. Llego la hora de diferenciar especulación con programas de crecimiento colectivo que nos incluyan a todos. Nos toca desandar la desacertada historia anti obrera, la de patotas armadas y la de esclavistas sociales que someten con el yugo de un plan.

Deberán dejarse de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR