Apostillas marbellenses

Entre el glamour y el hambre

La ceremonia fue una muestra de poderío por parte de las dos entidades cinematográficas que organizan el premio: Egeda (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales) y Fipca (Federación Iberoamericana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales). Entre los 2000 invitados había gente del mundo de la política, del empresariado, del espectáculo y alrededor de 200 periodistas de diversos países. Hubo invitados que llegaban en autos de altísima gama, mucho esmoquin, mucho vestido largo y millones de selfies que superaban a la cantidad de abanicos. Claro que, salvo aquellos que estaban en un regio vip, el glam terminó de golpe cuando hubo que hacer largas colas para intentar dar con algo para comer.

El clima, un buen socio

La entrega del Platino tuvo lugar en un anfiteatro al aire libre enclavado en una colina con vista al Mediterráneo. Como si fuera el cartel de Hollywood, acá hay otro que dice Marbella. En el anfiteatro con capacidad para unas 2000 personas todas las semanas se realizan grandes presentaciones. La ceremonia de los Platino fue una de ellas. En este caso, transmitida en vivo a infinidad de países. Si anteanoche hubiera llovido, no habría un plan B. Eso se llama confianza ciega en el clima de la Costa del Sol.

Casi sólo para varones

Se suele decir que el Platino es una especie de Oscar del cine latino. Claro que entre ambos hay tantas diferencias como algunas similitudes. Este año, el Oscar se olvidó de la corrección política y eligió solo a intérpretes blancos en las categorías actorales. En el Platino se da otra situación que parece estar a contrapelo de la corrección política. Entre los 41 miembros que integran el consejo de dirección de las dos entidades cinematográficas que dan vida al Platino solamente hay dos mujeres.

Impuestos

El actual gobierno del Partido Popular elevó en septiembre de 2012 el IVA a los espectáculos al 21 por ciento. En su momento, la medida tuvo un contundente rechazo por parte de la comunidad artística. Como se imaginaba, el consumo cultural descendió notablemente. En lo que hace al cine, a los dos años de su implementación ya se habían cerrado 61 salas. Sin embargo, Enrique Cerezo Torres, algo así como el dueño del cine local, el presidente de los Premios Platino y el presidente del Atlético de Madrid, explica a LA NACION su personal lectura del "ivazo...