Alberto ve fantasmas golpistas mientras sigue durmiendo con el enemigo

Cristina y Alberto se saludan en la Asamblea Legislativa, el 1° de marzo

"Con el entendimiento que logramos con el FMI, podemos ordenar el presente y construir un futuro. Repito: este es el mejor acuerdo que se podía lograr. Y gobernar es un ejercicio de responsabilidad. Gobernamos con convicciones firmes y con el pragmatismo necesario para saber qué es lo mejor para los argentinos y argentinas".

Así hablaba el presidente Alberto Fernández en la Asamblea Legislativa el 1° de marzo pasado, pidiendo al Congreso que lo acompañe confirmando el acuerdo como algo "esencial" para relanzar la alicaída economía argentina.

El acuerdo fue ratificado en el Congreso gracias a los votos del interbloque de Juntos por el Cambio y por otros sectores de la oposición. El bloque del Frente de Todos votó dividido, más de 30 legisladores le dieron la espalda a lo que pedía el Presidente que ellos mismos apoyaron. La Argentina no entró en default gracias a la oposición, negar eso es mirar el partido que quisieran jugar y no del que están participando. A partir de ahí es historia conocida, se redoblaron los embates de la vicepresidenta Cristina Kirchner, de su hijo Máximo, La Cámpora, el kirchnerismo en su conjunto, con la ayuda de varios intendentes y gobernadores que ponen un pie adentro del gobierno y lo sacan rápido como si recibieran una descarga eléctrica, que terminaron poniendo en jaque la estabilidad del pésimo gobierno de Alberto Fernández.

Vale recordar esta situación, sobre todo porque en los últimos días el propio Presidente no deja de acusar a la oposición, en especial a Juntos por el Cambio, a los mercados y al campo de pretender desestabilizarlo. Por abajo hacen otras lecturas y se sacan chipas entre ellos. Luis D´Elía acusa a Juan Grabois de desestabilizador, Grabois promete sangre y resalta la falta de dignidad del gobierno por el tipo de cambio especial anunciado para los exportadores de soja. Luego organizan marchas en defensa de la democracia que ellos mismos debilitan. Mientras tanto, para no perder la costumbre, funcionarios del gobierno desautorizaron al propio Presidente, como el secretario de Agricultura, Matías Lestani, que horas después de que Fernández embistiera contra el campo dijo que "acusar al productor de especular por esta cuestión es desconocer la dinámica del campo". No hay cohesión en el seno del oficialismo y esto ya pasó en reiteradas ocasiones y en distintas áreas, como en la energética, donde este tipo de cortocircuitos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR