Adiós al trajinar de expedientes: cómo otros países agilizaron la justicia

Aron Schvartzman, campeón argentino de ajedrez, cobró en octubre del año 2012 un juicio por reajuste de haberes jubilatorios. Fue una partida judicial que duró cinco años y el ajedrecista ganó a la edad de 103. Murió dos meses después.

Su caso es apenas una muestra de lo que sucede en la Argentina. En Comodoro Py, . Y la más importante de la historia reciente, la del atentado contra la AMIA, sigue impune.

que, por lenta, deja de ser justa fue, durante el siglo XX, un problema para buena parte de América Latina, heredera de Europa continental y de sus sistemas judiciales escritos y señoriales. Con el cambio de milenio, países como Chile, Uruguay y México encararon reformas judiciales hacia sistemas orales ágiles, con casos que se resuelven en un puñado de audiencias, un modelo más cercano a la idea que dejan las películas de Holly-wood. Ese cambio aún no llegó con fuerza a la Argentina, donde recién se ven los primeros avances.

El pasaje de un sistema inquisitivo, donde el juez investiga y resuelve, a uno acusatorio donde la pesquisa conducida por los fiscales (como impulsó Chile en el fuero penal, y Uruguay en el fuero civil); la oralidad de los procesos con el abandono de los elefantiásicos expedientes escritos; la digitalización de los procesos (como hizo, por ejemplo, Costa Rica con el programa "Hacia Cero Papel"); la instauración de oficinas judiciales que administren las tareas y les quiten burocracia a los juzgados (como experimentó Estados Unidos con el caseflow management); y el régimen del arrepentido cuando se trata de delitos complejos (como demostraron Brasil y Perú) son algunas de las soluciones que, con variantes, instauraron los países del continente para dinamizar sus sistemas judiciales.

La Argentina aún debe romper con el statu quo. "Se requiere un cambio cultural muy profundo", señaló el ministro de Justicia de la Nación .

fue un faro para la región, con lo que bautizaron allí como la "reforma del siglo". Empezó en 2001 y demoró unos siete años: se trató de una profunda reforma procesal que dio paso a un sistema acusatorio y oral en el fuero penal.

El nuevo sistema entró en vigencia por regiones, en cuatro etapas. El debut fue a las 9 del 21 de marzo de 2001, en La Serena. Cristián Cenzano había escapado con un botín de dos botellas de gaseosa del comercio de Ana Luisa Cisternas. Tras seis horas de juicio y otras dos y media de deliberación, el tribunal fijó una pena de 301 días de cárcel por el delito de amenazas.

Así, con los fiscales como protagonistas, en Chile los casos avanzan en audiencias por la controversia entre las partes, y el juez decide de inmediato de acuerdo con lo que vio...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR