Sentencia nº 50177 de Segunda Cámara Laboral de Apelaciones de la Provincia de Mendoza, Primera Circunscripción, 13 de Mayo de 2020

PonenteGOMEZ ORELLANO
Fecha de Resolución13 de Mayo de 2020
EmisorPrimera Circunscripción
MateriaDERECHO LABORAL - DISCRIMINACION LABORAL - MOBBING - MALTRATO LABORAL - LEY DE CONTRATO DE TRABAJO

foja: 518

CUIJ: 13-01942008-0((010402-50177))

MUÑOZ JULIETA ANDREA C/ BODEGAS SAN H.S. P/ DespidoEn la Ciudad de M., a los 13 de mayo de 2020, se hace presente en la Sala Unipersonal de esta Excma. SEGUNDA CAMARA DEL TRABAJO - PRIMERA CIRCUNSCRIPCIÓN DE MENDOZA, el Sr. Juez Dr. J.G.O., con el objeto de dictar sentencia definitiva en en el expedienteCUIJ: 13-01942008-0((010402-50177)), caratuladoMUÑOZ JULIETA ANDREA C/ BODEGAS SAN H.S. P/ Despido, de cuyas constancias

R E S U L T A:

A fs. 112 comparece el Dr. R.B. en nombre de J.A.M. e interpone demanda contra BODEGAS SAN H.S. por $ 79661,56 derivados de su despido.

Comenzó a trabajar el 1 de diciembre de 2009 como encargada de turismo de la bodega de la empresa, ubicada en calle Guardia Vieja de L.. Fue contratada por su condición de técncia en turismo y enóloga. Trabajaba de lunes a viernes de 9 a 18 horas y los días sábados y feriados, media jornada, en los horarios en que se acordaban visitas de contingentes turísticos.

Aclara que la producción industrial de la empresa la tiene en La Rioja. Que en M., abrió un espacio en la B.P., perteneciente a otra sociedad del mismo grupo empresario, con la que compartían administraciones. Que el personal jerárquico de ambas empresas era el mismo, siendo el máximo responsable el Sr. O.G.A..

La Sra. M. tenía encargado todo lo concerniente a turismo, eventos y promoción. Su labor se realizaba en la bodega, en lugares del gran M. y en la montaña, donde se desplazaba en su vehículo particular. Por esa labor realizó distintos convenios con hoteles, aparts y demás alojamientos turísticos. Entre sus logros, consiguió incorporar a la Bodega San Huberto en el circuito “Los Caminos del Vino” de L. de Cuyo. Así participó de diversos eventos (vendimia federal, música los caminos del vino, etc.). Además acreditó a la bodega en el Ministerio de Turismo de la Nación como “enoturística”, en la Provincia, y trabajó igualmente atendiendo prensa internacional en La Rioja, ya que maneja fluidamente francés e inglés.

Destaca que no fue contratada ni para vender productos ni para administrar el producido de las ventas. Que era muy difícil de manejar eso porque la bodega no contaba con un sistema de facturación que posibilitara el control de ventas y entregas de comprobantes al cliente. Cuando se realizaban ventas de productos durante el recorrido la actora, en un primer momento, entregaba los fondos al Sr. W.O. administrativo de la firma. Luego el gerente O.G.A. le comunicó que la Sra. M.F.B. también tenía las llaves de la caja, cuando no estaba O.. En abril de 2012 la demandada instrumentó un sistema de facturación, para controlar ventas y stock.

Cuando la tarea en turismo empezó a dar frutos, y llegaron contingentes, la actora solicitó un ayudante para limpieza de sala de degustación, atención a los visitantes, descorche y barra, control de stock y seguridad. En temporada alta (enero / marzo) la cantidad de gente era mucha, y necesitaron vigilancia.

A partir de estos requerimientos empezó un verdadero calvario para la demandante. El Sr. A. no solo se negó a los pedidos sino que se burlaba de ella, formalizando descalificaciones personales para su persona, de muy dudoso gusto, por ejemplo decirle “¿A vos no te da la cabeza para hacerlo sola?”.

A los pocos meses de estar vinculada con la firma, el Sr. A. comenzó a mostrarse quejoso, desubicado en su proceder, malhumorado y ciertamente violento. Se dirigía a la actora con malos modos, irrespetuosamente y con palabras soeces. Sus compañeros le comunicaron que ellos también siempre estaban acechados u hostigados por esa persona, pero que debían soportarlo para mantener su trabajo.

En el mes de marzo de 2012, al reincorporarse la demandante de su periodo vacacional, encontró su escritorio completamente desordenado y con falta de carpetas y la sala de degustación cambiada, sin listas de precios y con faltantes de stock. Todos los comprobantes estaban en poder del Sr. A.. Dicha persona le solicitó a los gritos que se presentara a su oficina, y una vez allí, con malos modales, en forma descortés, agresiva y con violencia, le requirió que ingresara y cerrara la puerta. Allí le dijo que había contratado a la Sra. L.R.: “Esta es la mina que te va a asistir en limpieza, ventas y control de stock”, le dijo adelante de ella.

Reitera que la conducta del Sr. A. con todo el personal (S.. B., Huenuñir, M., O., etc.) era siempre agresiva, agaviante, descalificadora; siempre un trato burdo, lenguaje chabacano, ordinario, lleno de insultos y malas palabras. Amenazaba siempre al personal, y fundamentalmente al personal femenino. Siempre decía que “se cuidaran de mandarlo al frente porque los rajaría a la m... del laburo”. Reitera que el trato siempre era a los gritos, malhumorado, etc.

Señala que la Sra. F.B. también era víctima de su acoso. Que llegó a tener un episodio de crisis de nervios, que motivó su atención por emergencias.

Dice que el acoso de la Sra. M. fue tremendo. Que se dirigía a ella como “p... inútil sin cabeza, pendeja de m..., hija de p...”, amenazándola para aumentar las ventas que si no se iba a quedar sin trabajo.

Que con el correr del tiempo los agravios fueron in crescendo, fue objeto de humillaciones y agresiones verbales de baja estofa y ciertamente irreproducibles. Se mofó de su contextura física, de gran porte, enviándole mails con fotos y comentarios sobre la obesidad.

Todo eso provocó el derrumbe emocional y piscológico de la demandante.

Acusa que nunca el Sr. A. colaboró con su tarea, pero sí se vanagloriaba con los logros de turismo. Para cumplir sus tareas, la actora debía contactarse con los gerentes de Buenos Aires. Dice que el Sr. A. le sacaba la documentación, alteraba reportes, etc.

Dice que las rendiciones de caja se hacían a Buenos Aires, quienes estaban al tanto de la desorganización del Sr. A., y por eso le señalaban sobrantes, faltantes, etc. para que las corrigieran. Como las rendiciones las hacía A., él se quedaba con los comprobantes.

Ante la gran cantidad de turistas que adquirían productos durante las visitas, se le pidió al Sr. A. si podía facturarse manual. La respuesta fue la acostumbrada: “hagan lo que quieran, emítanles o no les den comprobante y no me rompan las p...”.

También destaca que algunos gastos menores de los eventos eran abonados por la actora con la misma caja de Turismo.

Dice que la actitud del Sr. A. fue empeorando. Que empezó a espiarla y perseguirla literalmente cuando hacía visitas guiadas, degustaciones e incluso cuando iba al baño. Le decía cosas como: “que fuera a hacer la calle, que consiguiera más clientes para la bodega”,utilizando el doble sentido, injuriando y rebajando a la empleada.

A medidados del año 2012, y por la enfermedad de la Sra. B., el Sr. A. le requirió que el dinero de recaudación y tickets de tarjeta, fechados con su supervisión, fueran depositados en sobre cerrado en la caja fuerte del sector Degustación.

El día 15 de junio de 2012 la Sra. L.R. la llamó a la actora por teléfono y le dijo:“el viejo se volvió loco, ha empapelado la sala de turismo con listas de precios, hasta en el baño las puso, se sacó”.Prácticamente de inmediato, recibió una llamada del Sr. A. a los gritos reclamándole las llaves de la caja. La actora le contestó que estaban en su poder, y que las copias las tenían el propio A. y el Sr. R.W.O.. Que el Sr. A. podía sacar dinero de los sobres para solucionar un problema de cambio que adujo que tenía. El Sr. A. le contestó: “no te hagas la p... y venía ya para la bodega”.

En ese momento el maltrato psicológico alcanzó el climax. Tremendamente abrumada y en situación desesperante la actora llegó a duras penas a su domicilio, y su esposo de inmediato la llevó a recibir asistencia de salud. Fue así que el médico psiquiatra Dr. E.P. le prescibió una licencia por 30 días.

Que el día 18 de junio de 2012 el marido de la actora, A.G., y su padre, R.M., asistieron a la bodega a entregar la certificación médica. Que fueron violentamente increpados por A., el que con epítetos irreproducibles los echó del lugar, amenzándolos con golpearlos.

El 21 de junio de 2012 la actora envía sendos telegramas intimando a que cesaran las conductas descriptas. De no ser así, se daría por despedida.

Relaciona el cruce epistolar.

La actora debió concurrir a control médico, que ratificó su diagnóstico.

Los médicos consignaron que la actora padecía trastornos con depresión y ansiedad generalizada, con síntomas fóbicos, reactivos a problemas del lugar de trabajo.

Luego de diversos cruces epistolares que relata, refiere que en fecha 22 de diciembre de 2012, comunicó que el día 26/12 vencía el periodo de licencia y que por persistir las circunstancias que dieron lugar a su padecimiento psiquiátrico: maltrato, descalificación, de parte del Sr. A., extremos que se reiteran postalmente a través de diversos acosos de parte de la oficina de Capital Federal, todo lo cual calificaba como moobing, se consideraba despedida indirectamente con justa causa.

La demandada temerariamente intimó a la actora a retractarse.

En fecha 3 de enero de 2013 se rechazó la epistolar.

No obstante, la actora debió continuar soportando peores cosas aún, ya que a fines de 2012, y cuando se había consumado la desvinculación, fue notificada que debía concurrir a la Unidad F. Especial de Delitos Complejos, ya que había sido denunciada por “administración infiel” por la empresa demandada.

La denuncia fue radicada el 14 de noviembre de 2012, contra la actora y la Sra. M.F.B.. Justamente, dos mujeres, brutalmente acosadas, perseguidas, vituperadas y víctimas de todo tipo de violencias de género, de parte del responsable máximo de la firma en M., Sr. O.G.A..

Se realiza una “falsa denuncia penal” lo que así fue acreditado sobradamente en esa sede.

Acusa extensamente a la empresa de manipular hechos y documentación en su contra.

Refiere que igualmente manipuló a la justicia de faltas, denunciando al marido y al...

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